Todos los vestuarios deberían tener un tipo como Joseba Llorente. Sólo los jugadores de la Real saben el ambiente que se respira en las duchas de Zubieta y Anoeta en esta complicada fase de la temporada. Pero, a falta de otra voz que suba el ánimo de los blanquiazules, ya está el delantero hondarribiarra para motivar a sus compañeros.

Joseba Llorente puede ser una persona inquieta, nerviosa, correosa, agitada, traviesa... Pero si algo se debería destacar del ariete es su capacidad para motivar a las personas que le rodean. Al escuchar sus palabras ayer en Zubieta tras la sesión realizada a puerta cerrada, la afición txuri urdin debería dedicarse a arropar a su equipo y a devolverle la confianza a la plantilla.

El guipuzcoano mandó un mensaje claro a los seguidores: «La gente quiere sacar los partidos. No somos masoquistas, no queremos perder los partidos. Si es peor para nosotros, porque tenemos que salir a la calle, tenemos que dar veinte mil explicaciones. A los que más nos duele es a nosotros porque tenemos que vivir las 24 horas del día pensando en lo mismo».

Y otro a sus propios compañeros: «La gente está un poquito atemorizada, pero tenemos que echarle, sobre todo, bastante jeta, porque estamos viendo que si tú no pisas, te están pisando todos los equipos. Tenemos que empezar nosotros a pisar, porque no hay otra, porque somos la Real y tenemos que jugar así».

Ya desde la primera pregunta se le notó esa seriedad que produce el no estar en la situación deseada. Con un rotundo «preocupado sí, pero asustado no», aclaró el sentimiento que lleva por dentro, para acto seguido añadir que «no podemos estar todo el día llorando, porque son dos semanas larguísimas. Lo que tenemos que hacer es entrenar bien, a tope. Sabemos que no estamos haciendo bien las cosas, pero esto sigue».

Lo personal, al margen

Está claro que, de momento, no está siendo el mejor comienzo del guipuzcoano. No cuenta con la total confianza de Philippe Montanier, ya que sólo ha tenido minutos en tres partidos, todos ellos como suplente.

Este tema ha dado y está dando mucho que hablar en el entorno txuri urdin, pero el propio Llorente quiso esquivarlo al darle más importancia a la situación del equipo: «No jugar a todos nos duele, porque si no nos doliese, no seríamos futbolistas ni llegaríamos a donde estamos. Son decisiones que hay que acatarlas y no queda más. Ni antes ni ahora vamos a hacer un grano en esto, porque bastante tenemos como para que ahora empiece cada uno a hablar de su situación. Todos sabemos y sabéis cuál es mi situación, pero punto. Ya llevo dos meses hablando de lo mismo y la verdad es que ahora menos que nunca me apetece hablar».

También se refirió al estudio de los rivales que realiza Montanier. «A mí nunca me ha gustado ver a los contrarios. Yo tengo una manera de jugar y tenemos que hacernos muy fuertes en nuestra manera de jugar y confiar mucho más en nosotros, que tenemos buen equipo».

La puntilla de su comparecencia llegó, justamente, al final de ella, al hablar de lo que significa el parón liguero: «Lo de la falta de competición no lo entiendo. Yo compito aquí todos los días. Hacemos partidos de media hora o cuarenta minutos y compito como si fuera un partido. Es más, hago más carreras para intentar estar fatigado». Sin duda, todo un ejemplo a seguir.

solidaridad desde argentina. Los actos solidarios a favor de los presos vascos no cesan por todo el mundo. El último nos llega desde la localidad argentina de Pergamino, a 120 kilómetros de Rosario. El Club Atlético Douglas Haig, fundado el 18 de noviembre de 1918, se fotografió con la pancarta de la imagen poco antes de comenzar su último partido.