ELECCIONES EN UN NUEVO TIEMPO
Urkullu insta al PP a que tenga «altura de miras»
Iker BIZKARGUENAGA | BILBO
«Solicitamos al Partido Popular madurez y altura de miras para abrir un nuevo ciclo en Euskadi. Estamos cerrando el ciclo de la violencia. Hoy es el día para iniciar la auténtica transición en Euskadi. Hoy es el día de iniciar el ciclo del acuerdo, de la inteligencia y de las soluciones compartidas». Iñigo Urkullu dejó para el final el principal mensaje de un discurso que comenzó felicitando al PP y a Mariano Rajoy por su victoria «clara y nítida en España», y donde también quiso agradecer a los candidatos y afiliados de su partido el trabajo realizado durante la campaña. «Este resultado el un reconocimiento al `modelo PNV'», sostuvo el líder jeltzale.
Lo cierto es que el PNV afrontaba estas elecciones con una inquietud que apenas ha pretendido disimular durante la campaña, en la que se ha esforzado de forma muy intensa y donde la mayoría de los mensajes iban destinados a criticar a la izquierda abertzale. Después de perder Ajuria Enea y dos de las tres diputaciones que gobernaban hasta el pasado 22 de mayo, los jeltzales veían con pavor la posibilidad de quedarse sin grupo parlamentario en Madrid.
Y cuando, a eso de las 20.00 las encuestas barajaban la opción de que el PNV se quedara sin grupo -los sondeos a pie de urna de otorgaban entre 4 y 5 diputados- a buen seguro que la inquietud no hizo sino aumentar. Fue cuando, con el 32% de los votos de la CAV escrutados, los datos aseguraban a los jeltzales cinco escaños en Madrid, cuando empezaron a trasladar un mayor alivio. Al menos, esa era la sensación que trasmitía Aitor Esteban, uno de los que ha revalidado su cargo en Madrid, cuando los periodistas acreditados en Sabin Etxea le daban el dato.
La verdad es que, más que alegría era alivio lo que se sentía entre los dirigentes del PNV y el centenar de afiliados que les secundaba cuando Urkullu, poco después de las 22.30, comparecía junto a los candidatos de su partido. Fueron recibidos por un caluroso aplauso.
El político de Alonsotegi declaró que el objetivo del PNV era «volver a ser primera fuerza en Euskadi -en referencia a Araba, Bizkaia y Gipuzkoa- y tener grupo parlamentario», y expresó su satisfacción por haberlo conseguido. «Hoy ha quedado claro, una vez más, que España es España y Euskadi es Euskadi» había dicho antes, cosechando una ovación.
Urkullu dedicó también buena parte de su discurso al ámbito económico, señalando que la situación «es hoy más complicada y difícil que hace tan solo una semana». Por ese motivo, hizo un llamamiento a «un gran acuerdo entre todos los partidos para afrontar esta situación». «La situación en el Estado es de extrema gravedad», insistió.
En este mismo sentido, enumeró los cuatro compromisos con los que el PNV afronta la próxima legislatura: «responder a la crisis económica, consolidar la paz, actualizar el autogobierno y acordar el nuevo estatus político para Euskadi». Por ello, sostuvo que los votos de los diputados y senadores del PNV van a ser para la «recuperación económica y el empleo», «la paz y la concordia» y para «el autogobierno y un nuevo estatus político».
Ya en la parte final de su alocución, y antes de saludar a afiliados y simpatizantes, Urkullu manifestó que «no hay actividad armada, pero la paz necesita de más pasos», agregando que «el próximo presidente de España tiene la responsabilidad de afrontar esta situación». «En este objetivo -apostilló- el PNV siempre estará para colaborar, porque la paz definitiva es el máximo objetivo de Euskadi».
Satisfacción de Uxue Barkos
El líder del PNV también expresó su satisfacción por los resultados de Geroa Bai, cuya candidata, Uxue Barkos, se mostraba emocionada por mantener el escaño. En declaraciones ante sus simpatizantes en Iruñea, la periodista dijo que irá a Madrid con «más orgullo si cabe que en 2004 y que en 2008». «Y sí cabe», sentenció. Asimismo, Barkos sostuvo que su coalición ha sido la que «una vez más ha conseguido cambiar el mapa político» de Nafarroa, y declaró que con su escaño será «un freno» para la política del PP.
Antigüedad recordó a Santi Brouard y Josu Muguruza, ambos víctimas de la guerra sucia que fallecieron el 20N. El candidato quiso resaltar la importancia de la memoria de cara a los nuevos tiempos.
Además de la fiesta en el frontón Labrit, a la que acudieron los siete candidadatos al Congreso que resultaron elegidos, se celebraron encuentros en la sala Jimy Jazz de Gasteiz, el frontón la Esperanza de Bilbo y en el Doka Kafe Antzokia de Donostia.
El presidente del PNV dijo que el PP «tiene por delante una gran responsabilidad con Euskadi y con España». A su juicio, «es la responsabilidad de la paz definitiva».