El Parlamento de Corea del Sur aprobó ayer el Tratado de Libre Comercio (TLC) con EEUU en una votación marcada por los enfrentamientos físicos entre diputados y el lanzamiento de una bomba lacrimógena.

Los diputados del oficialista Gran Partido Nacional (GNP) utilizaron su mayoría parlamentaria para aprobar el polémico acuerdo, que entrará en vigor el 1 de enero.

El TLC entre Corea del Sur y Estados Unidos ha sido fuente de una gran controversia debido a la cláusula llamada ISD, que permitirá a inversores y empresas extranjeras en Corea del Sur acudir a instancias internacionales para solucionar sus disputas con la administración surcoreana.

Las fuerzas opositoras, con el Partido Democrático a la cabeza, se oponen rotundamente a esa cláusula que, consideran, beneficia a las empresas estadounidenses frente al Gobierno surcoreano.

Al no poder impedir la aprobación parlamentaria del TLC por estar en minoría, la oposición ha intentado bloquear físicamente la entrada a la sala, hasta que ayer los legisladores del GNP ocuparon por sorpresa la Cámara Baja y convocaron una sesión plenaria.

El diputado Kim Sung-dong, del minoritario Partido Democrático Laboral, lanzó un dispositivo de gas lacrimógeno cerca del asiento del portavoz del Parlamento, que causó el desalojo parcial de la sala y algunos problemas leves de respiración a algunos diputados.