En al menos tres entrevistas publicadas ayer en otros tantos grupos editoriales, Íñigo Urkullu aseguraba que en mayo «obtuvimos 8.000 votos de diferencia en comparación con Bildu y ayer obtuvimos 39.000 votos más que Amaiur». Su conclusión es que «hemos crecido en diferencia de votos». Pero esa conclusión es falsa porque los datos no son ciertos.

Veamos: En el ámbito de Hego Euskal Herria, el PNV obtuvo en mayo 333.543 votos y Bildu 316.189. El PNV aventajó entonces en 17.354 votos a Bildu. El domingo, el PNV sumó 323.517 papeletas y Amaiur 333.628. Es decir, pese a lo que dice Urkullu, la ventaja no sólo no ha aumentado, sino que ahora Amaiur sobrepasa en 10.111 votos al PNV.

Y si el marco de referencia para los jeltzales es la CAV, porque el PNV no se presentó en Nafarroa, la cuentas de Urkullu tampoco salen. En mayo el PNV obtuvo 333.543 votos y Bildu 273.273. Los jeltzale superaron en 60.270 papeletas a Bildu. El domingo, el PNV sumó 323.517 votos y Amaiur 284.528. El PNV está 38.989 papeletas por encima de Amaiur. Esto supone que el independentismo de izquierdas ha recortado en 21.281 votos la ventaja que le sacó el PNV.

Lo llamativo no es sólo que el presidente del EBB aplicara la creatividad matemática para hacer las cuentas que creyó convenientes, sino que ninguno de los periódicos comprobó los datos. Es más, uno de Vocento los hizo expresamente suyos pese a que el cuadro de páginas atrás los contradecía.