«Premonición» es una película de autoayuda para afrontar la muerte de los seres queridos
M. I. | DONOSTIA
Tengo la sospecha de que esta película de hace tres años ha sido rescatada del limbo de la distribución por la presencia de John Malkovich, quien luce una imagen similar a la celestial del famoso anuncio de café coprotagonizado junto a George Clooney. Por lo demás, «Afterwards» es una película difícil de encajar en la cartelera comercial, por su indefinición genérica. Gravita entre el thriller paranormal, el drama existencialista y la tragedia romántica. Responde a un perfil cercano al que tenía también «Más allá de la vida», aunque sin la personalidad de un cineasta como Clint Eastwood, capaz de lidiar con lo esotérico sin caer en el ridículo.
Romain Duris es un abogado neoyorquino de origen francófono, al que un misterioso doctor que se autoproclama «mensajero» capta para una misión relacionada con el paso a la otra vida, debido a que de niño sufrió un accidente con parada cardiaca y muerte clínica al que sobrevivió milagrosamente. El suspense que aporta la novela original de Guillaume Musso reside en saber exactamente el plan que el personaje encarnado por Malkovich tiene para él.