Euskal Herrian Euskaraz (EHE) realizó ayer una acción simbólica en la sede de Euskarabidea para denunciar que este organismo es utilizado por el Gobierno navarro «para llevar a cabo el fraude de una política lingüística de imposición».

Esta protesta se enmarca en la denuncia que EHE está llevando a cabo con motivo de los 25 años de la Ley del Vascuence, que se cumplen el 15 de diciembre. Para ese día, han convocado 20 c0ncentraciones en distintos puntos del herrialde con el lema «Euskaraz bizi nahi dugulako, hizkuntza politika burujabea».

Ayer, un grupo de miembros de EHE entraron en la sede de Euskarabidea y tras pegar en las paredes carteles con el lema «Euskarabidea itxita», colocaron cadenas en la puerta mientras lanzaban panfletos en los pasillos. No se registró ningún tipo de incidente y los autores de la protesta abandonaron el lugar sin problemas.

EHE destacó que durante un cuarto de siglo la Ley del Vascuence ha supuesto la zonificación de Nafarroa, dividiendo los derechos lingüísticos según el lugar de residencia, y que busca evitar que se avance en la normalización del euskara.