El exceso de confianza en la recta final de un partido que tenía controlado pudo costarle caro al Eibar. Los apuros finales, sin embargo, no empañaron el triunfo de los armeros y menos aún su espectacular trayectoria, que les ha llevado a encadenar seis triunfos y cinco empates.

En un primer tiempo denso, el Eibar sentenció con un penalti de Arruabarrena y un gol de Lombraña a pase de Bingen. La Gimnástica reaccionó tras el descanso, marcó por medio de Negredo y rozó el empate finalmente evitado por Xabi.