La resaca
Calendario y lista de bajas se alían frente al optimismo
Los rojillos despedirán el año con cuatro partidos en diez días. Hay cuatro bajas aseguradas y otros cuatro jugadores en duda para la visita al Málaga.
Amaia U. LASAGABASTER
Osasuna sigue en racha. En los siete últimos encuentros ha encajado una sola derrota, ha firmado dos empates y ha celebrado cuatro victorias, dos de ellas de manera consecutiva. Una trayectoria que confirma uno de sus mejores arranques ligueros y que le sitúa en la séptima plaza de la clasificación, pegadito a zona europea y con nueve puntos ya de ventaja respecto al 18º clasificado, lo que sigue siendo su principal referencia.
En este sentido, los números son inmejorables. En las cinco últimas temporadas, la media de puntos que ha asegurado la permanencia ha sido de 41,2. Con 14 encuentros disputados, poco más de un tercio de la Liga, el equipo iruindarra ya ha conseguido la mitad.
El optimismo, sin embargo, sólo puede ser moderado. Y no porque en el triunfo frente al Betis la victoria tuviera tanto que ver. A fin de cuentas es algo con lo que hay que contar de vez en cuando. Sin el calendario y la lista de bajas los factores que se alían en contra de los augurios más positivos. Y es que el año se despide con un pequeño maratón de partidos. Entre el domingo y el próximo 21 de diciembre, los rojillos disputarán cuatro encuentros (Málaga y Villarreal en Liga y la eliminatoria copera frente al Almería). Un calendario que se puede convertir en problema como consecuencia de un parte de bajas que, al menos de cara a la visita a La Rosaleda, puede volver a ser extensa, con la defensa de nuevo como la línea más afectada.
Lenta recuperación
José Luis Mendilibar cuenta, para empezar, con cuatro bajas aseguradas. Las de los lesionados Echaide y Masoud, a las que se unen Damià y Nekounam, que el domingo vieron su quinta cartulina amarilla. Pero es que además hay cuatro hombres en duda, de los que dos casi pueden darse por descartados. Se trata de Marc Bertrán, que no acaba de recuperarse y vuelve a entrenar al margen del grupo, y de Rubén, que el domingo se retiró del campo tras sufrir un pinchazo en el muslo. Se teme que pueda sufrir una rotura en el bíceps femoral, aunque habrá que esperar a las pruebas a las que se someta mañana. También se examinará a Raúl García, con el que se es más optimista, pero que también entra, con molestias en la parte posterior del muslo, en el capítulo de dudas. Se une a la de Sergio, que debería regresar, pero cuya recuperación también se está retrasando más de lo esperado.
Aunque Mendilibar puede volver a contar con Satrustegi, el quebradero de cabeza en La Rosaleda llegará en el lateral diestro, con la ausencia segura de Damià y la casi asegurada de Marc Bertrán.
Cabeza fría
Hay freno, por tanto, para el optimismo, aunque algunos no necesitan este tipo de vicisitudes para mantener la cabeza fría. Es el caso de Miguel Flaño, «satisfecho» con la situación de Osasuna, pero consciente de cuál es su principal objetivo. «El nuestro es la permanencia -aseguró ayer. Y tan ambicioso es el que piensa en la UEFA como el que mira partido a partido. No hay que volverse locos. Hay que seguir sin renunciar a nada, sumando el mayor número de puntos posible, pero sabiendo cuál es el objetivo. Y estando también preparados para los momentos complicados».
Masoud pasó ayer por el quirófano en Alemania, donde permanecerá las dos próximas semanas.
La intervención, en la que también estuvo presente el médico de Osasuna Patxi Cipriain, es la cuarta a la que se somete el jugador persa desde que se fracturara el quinto metatarsiano del pie izquierdo el pasado 3 de abril en el encuentro frente al Atlético de Madrid. Una lesión que, de momento, le ha impedido vestirse de corto esta temporada. A.U.L.
En las cinco últimas temporadas se ha necesitado una media de 41 puntos para lograr la permanencia. Con poco más de un tercio de la Liga disputado, Osasuna ya tiene la mitad.
Con Flaño ya son siete los rojillos que han visto puerta esta temporada. Nekounam y Raúl García han anotado cuatro goles, Ibrahima y Nino tres, Cejudo dos y Lamah y el central navarro uno.