El tijerezazo se combate a pie de calle en Nafarroa
Desde que en setiembre se anunciara la primera batería de recortes en Nafarroa, diversos colectivos y muchas personas a título particular comenzaron a buscar una línea de movilización común. Ha habido recogidas de firmas, protestas constantes frente a Diputación y este sábado llega el colofón con una manifestación que se prevé masiva.
Aritz INTXUSTA
Fernando Sanz trabaja en las cocinas del complejo hospitalario de Nafarroa. En total, hay unas 200 personas que desempeñan esa labor, la inmensa mayoría mujeres y gran parte de ellas superan los 50 años. La alarma estalló pronto dentro de ese colectivo. «Todo empezó con las oposiciones de nivel E. Se habían anunciado 102 plazas y, de un día para otro, vía decretazo, se quedan en la mitad», explica Sanz. Poco después, a través de una carta anónima, los trabajadores se enteraron de que se pretendía privatizar el servicio de comidas, con riesgo de una pérdida de calidad y una menor especificidad del menú para los pacientes.
Pronto, los trabajadores de las cocinas del hospital entraron en contacto con los afectados por la eliminación de las plazas de oposición y este foro se agrandó con la llegada de otros colectivos, sindicatos y asociaciones de todo tipo. «Todo empezó cuando la gente y los colectivos supieron que con los recortes se acababan las subvenciones y que, con ello, su labor peligraba. Estábamos todos en la misma situación», comenta Sanz.
En ese foro desembarcaron también los sindicatos más combativos y, desde el primer momento, cobraron fuerza los grupos preocupados por qué ocurriría con la renta básica, como la Asamblea de Parados y la Plataforma por el Derecho a la Renta Básica, y también colectivos en defensa de la sanidad, como el que pelea por que se mantenga el laboratorio del Hospital de Tutera. Mientras tanto, el ejemplo de las luchas del profesorado en favor de una educación pública de calidad que garantice la igualdad de oportunidades marcó un camino que pasa por la movilización ciudadana. Poco a poco, las reivindicaciones particulares se fueron unificando, naciendo así un nuevo espacio plural que se consolidó como la Plataforma contra los Recortes. Con la manifestación del sábado en Iruñea se medirá el potencial de esta nuevo ejemplo de asociacionismo.
Educación en euskara y en los pueblos
A Aitziber Larrea, de Sortzen Ikasbatuaz, le preocupa qué va a ser del sistema educativo público: «Los recortes en la consejería se iban dando año tras año, pero ha sido en los últimos meses cuando se ha puesto más salvaje. No se trata sólo de recortes hacia el profesorado, sino que es algo global, ya que la tijera se ha metido en otras partidas indirectas». «Las asociaciones de padres y madres ven recortada su financiación, lo que implica el fin de muchas actividades y cursos para padres», continúa antes de ponerse cáustica al hablar de lo que le toca a Sortzen: «No queremos ni mirar qué subvención tendremos el año próximo».
Los más expuestos a los recortes educativos, en su opinión, son los colegios rurales. «En Nafarroa se están cerrando escuelas en pueblos para no volverse a abrir jamás. Es prácticamente el único sitio de Europa donde ocurre esto, ya que, normalmente, en pueblos pequeños se cierran escuelas porque no se llega al mínimo de niños y, después, se rehabilitan cuando se vuelve a alcanzar ese número. En Nafarroa, por contra, al no haber fijado ese mínimo, cuando se cierran, desaparecen para siempre», denuncia. La situación se agrava aún más cuando hay pocos niños y quieren estudiar en euskara en la zona donde está vetado, subraya.
Josefina Arregui y la renta básica
Más allá de los conflictos sanitario y educativo -que ya han protagonizado protestas, paros y huelgas con un respaldo de miles de personas-, el tijeretazo de UPN y PSN para 2012 ha abierto también un frente en el ámbito del bienestar social. El ejemplo más emblemático es lo ocurrido en el centro sicogeriátrico Josefina Arregui, en Altsasu. Arantza Salegi trabaja en esta clínica como auxiliar. El único centro de día para pacientes con demencia tiene capacidad para 25 plazas se queda en 2012 sin concierto con el Gobierno. «Además, la Agencia Navarra de la Dependencia ha notificado el fin de la compatibilidad de la ayuda económica por permanencia en domicilio y la asistencia en nuestro centro», explica Salegi. «Hasta ahora la mayoría de nuestros usuarios percibían las dos ayudas y, por ello, prevemos que muchos renuncien a ser asistidos por el centro. Esto supone sobrecargas económicas a las familias y un mayor trabajo de cuidados», resume.
La otra gran puñalada en el ámbito de los servicios sociales está relacionada con la renta básica. En principio, cualquier navarro que no cuente con ingresos puede solicitar esta ayuda que, pese a tener una sencilla tramitación, se tarda meses en conceder. Como el Gobierno no destinaba fondos suficientes para abastecer la demanda cada vez mayor de personas sin ingreso alguno, recurrió a Cáritas para que adelantara el dinero. Pero la institución religiosa ya no da más de sí. En 2009 adelantaban 1,1 millones de euros y en 2011 han puesto 4,6. Además, el Gobierno se retrasaba en los pagos. Con la llegada de los recortes, el PSN ha decidido endurecer los criterios para conceder la renta, aunque ello suponga dejar a más gente en la miseria, tal como denuncia la Plataforma por el Derecho a la Renta Básica, que también participa de esta ola movilizadora y que hoy mismo realiza una concentración para denunciarlo.
Más parados y más horas extra
Israel González, portavoz de la Asamblea de Parados, considera que el tijeretazo se va a traducir en una mayor destrucción de empleo y recuerda que «las personas que no tenemos trabajo somos casi 46.000». Afirma que «en una situación como la actual es el Gobierno el que debe de convertirse en el motor de la economía y generar empleo público, pero da pasos justo en el sentido contrario». En particular, la consejería que dirige Lourdes Goicoechea -Desarrollo Rural, Industria y Empleo- contará con un 8,34% menos de recursos en 2012 para hacer frente a la sangría de puestos de trabajo.
Por otro lado, la Asamblea de Parados está llevando a cabo una campaña de concienciación sobre las consecuencias de realizar horas extras cuando hay tanta gente sin trabajo. En este sentido, califican de «broma amarga y de mal gusto» que el Gobierno navarro se haya reservado 1,5 millones de euros para pagar horas extras a sus funcionarios.
Apuros en cultura y en los municipios
Los recortes del Gobierno resultan especialmente duros para la cultura, donde suponen un tijeretazo de uno de cada cinco euros. La crítica situación se ve reflejada en la crisis que vive la Escuela Navarra de Teatro, que podría verse abocada al cierre. «A mí, si lo cierran, me joden la vida», afirma sin tapujos Irantzu Sánchez, alumna de la ENT. «Ésta es la única institución que imparte Arte Dramático de manera formal. Si la cierran, tendré que irme de aquí», continúa. Pero el golpe no lo sufrirán únicamente los estudiantes, sino que repercutirá sobre las compañías autóctonas. «Las pequeñas compañías se quedan sin su escenario para exponer sus obras y, muchas de ellas, sin su local de ensayo», resalta.
Los alcaldes y concejales de Bildu y NaBai también se han sumado a la manifestación del sábado, y acudirán con una pancarta propia. La reivindicación de un sistema financiero estable para las entidades locales constituye una reivindicación recurrente de los municipios navarros, pero los recortes emprendidos en setiembre y las previsiones para el año próximo amenazan con «abocar a la quiebra» a algunas de estas instituciones.
«El modelo está caduco», señala tajante Ur Algero, el alcalde independiente de Areso (unos 300 habitantes). «El Gobierno impulsa una serie de obras a las que dota de enormes subvenciones de tal manera que o te acoges el proyecto o te quedas fuera. Esto supone que el ayuntamiento debe afrontar unos gastos fuertes los próximos años que están fuera de su capacidad. Hasta ahora, esto se corregía vendiendo suelo, pero con el ladrillazo se acabó el modelo», puntualiza. Este alcalde denuncia, además, que el recorte en el fondo de transferencias corrientes roza lo ilegal: «A nuestro pueblo nos habían prometido 20.000 euros y ahora nos hemos enterado de que la partida se ha quedado en cero».
La Asamblea de Parados considera una «broma amarga y de mal gusto» que, mientras hay 46.000 personas desempleadas, el Gobierno de Barcina haya reservado 1,5 millones de euros a pagar horas extras a sus funcionarios.
El endurecimiento de las condiciones para acceder a la renta básica se tramita hoy en forma de ley en el Parlamento. Para ahorrar costes, el PSN ha decidido dejar a más personas sin acceso a ningún tipo de prestación económica.
Los ediles abertzales se suman a la manifestación del sábado con pancarta propia. A los recortes anunciados se suma una financiación municipal deficitaria endémica que se agravó por el fin del auge inmobiliario que permitía obtener ingresos extras.