Esta misma mañana el alcalde de Gasteiz, Javier Maroto (PP), recogerá en Bruselas el título de Capital Verde Europea, un reconocimiento medioambiental, ostentado por Hamburgo durante el año 2011, que tiene por objeto premiar las políticas de sostenibilidad impulsadas por la capital alavesa.

Mientras el primer edil se encuentra en Bruselas -adonde llegó ayer acompañado por los portavoces de Bildu y del PNV, Kike Fernández de Pinedo y Gorka Urtaran-, en Gasteiz los diferentes grupos que conforman la oposición critican la política medioambiental puesta en marcha por el actual Gobierno local.

Si el martes el portavoz del PSE en el Consistorio gasteiztarra, Patxi Lazcoz, compareció ante los medios para denunciar el fin de la redensificación urbana prevista cuando él ocupaba la Alcaldía, ayer Itziar Ameztoy (Bildu) y Alvaro Iturritxa (PNV) tomaron el micrófono de la sala de prensa para cuestionar la situación de la movilidad y exigir el cierre del Anillo Verde. Dos iniciativas defendidas por los responsables gasteiztarras ante el tribunal encargado de otorgar el título de capitalidad verde.

La edil abertzale fue la primera en hablar ayer en rueda de prensa. Ameztoy compareció en el Consistorio para denunciar la interrupción del servicio de préstamo municipal de bicicletas, incluido en el plan de movilidad.

Según explicó la concejala, el préstamo de bicicletas finalizará el 31 de diciembre, ya que, a día de hoy, el Gobierno local no tiene previsto prorrogar el contrato con la empresa responsable del mismo, ni piensa adjudicar la labor a una nueva sociedad. «Esta alarmante supresión supone una involución manifiesta del plan de movilidad sostenible», añadió.

A su parecer, la situación de crisis económica no excusa la supresión del servicio, y afirmó que el próximo mes de enero el Consistorio tiene previsto organizar una fiesta privada para 300 personas. Una cena de 71.000 euros -235 euros por persona- que correrá a cargo de las arcas municipales.

Vertido de escombros

Por su parte, Iturritxa denunció la aparición de un vertido de escombros en el Alto de las Neveras, una zona agrícola situada al suroeste de Gasteiz. Según explicó, la escombrera ilegal, que podría almacenar entre 5.000 y 10.000 toneladas, se extiende sobre una superficie de 6.000 metros cuadrados.

El edil lamentó la existencia del vertedero, y solicitó al Ejecutivo local medidas para poner fin al mismo. A su vez, Iturritxa propuso la creación de un bosque en dicha zona, una arboleda para cerrar el Anillo Verde.