Si Gescrap Bizkaia Bilbao Basket cae esta tarde frente al Fenerbahçe-Ulker, el Caja Laboral estará matemáticamente en el top 16 de la Euroliga. En un partido calificado como «decisivo» por Dusko Ivanovic, la escuadra baskonista borró del mapa a un Nancy que, desde la marcha de Batum, se ha ido desdibujando hasta la caricatura.

La escuadra gasteiztarra vivió un partido plácido en el que se volvió a la rotación de diez jugadores, toda vez que San Emeterio y Milko Bjelica volvieron a disponer de minutos. Desde el arranque, los baskonistas dieron cuenta de su rival a base de defender con seriedad y con Teletovic como ejecutor. De hecho, el bosnio, con 22 tantos al descanso -luego casi ni jugaría-, superaba en anotación al Nancy, que se despedía de sus opciones con 21 tristes puntos al receso.

El Iradier Arena vivió un partido tranquilo como pocos en lo que va de campaña, aunque esa relajación en el ambiente no se tradujo en una mala dinámica de juego por parte del Caja Laboral Baskonia, que mostró una imagen bien seria durante los tres primeros cuartos.

Después de llegar 42-21 al descanso, con el partido virtualmente decidido, los hombres de Dusko Ivanovic regalaron sus diez mejores minutos de lo que va de temporada. En un tercer cuarto de fantasía, el Caja Laboral Baskonia endosó un 29-9 al Nancy, con un festival de triples sin fallo que desarboló a un conjunto francés que perdió el partido y la dignidad. Así, San Emeterio, que saltaba de los vestuarios con valoración negativa, dio una lección de concentración a la hora de tirar y rebotear, mientras que sus rivales carecían de la mínima actitud. Oleson o Prigioni también ponían gotas de calidad; en el banquillo galo no querían ni mirar.

Con los deberes hechos, el último cuarto estuvo de sobra. Al Baskonia le costó casi cuatro minutos y un parcial de 0-10 antes de anotar. De la mano de Heurtel, la renta gasteiztarra «se quedó» en 35 puntos.