«Ahora mismo no vivo del fútbol, pero tampoco descarto la posibilidad de hacerlo»
Futbolista
Xabi Bautista es uno de los futbolistas modestos que juega a fútbol por afición. Siempre lo ha hecho, así lo va a seguir haciendo, aunque si le llega la opción de vivir con lo que más le gusta hacer, está dispuesto a probarlo. De momento ha dado un pasó más, ya que de estar jugando en el Allerru de la Preferente guipuzcoana, ha pasado al Burgos Promesas 2000 de la Tercera División.
Jon LEUNDA
Xabi Bautista es hijo del exfutbolista guipuzcoano José María Bautista, que fue jugador del Sanse, Burgos CF, Real Burgos, Celta, Lorca y Eibar. Nació en Burgos, pero ha vivido a caballo entre la ciudad castellano leonesa y Gipuzkoa.
¿Cómo ha sido el paso entre el Allerru y el Burgos Promesas?
El año pasado jugué en el Allerru de la Preferente guipuzcoana y en verano quise probar con el Burgos Promesas del grupo octavo de la Tercera División. El entrenador me conocía y decidieron que me quedase allí. Estoy muy contento, la categoría es nueva para mí y estoy disfrutando mucho.
¿El equipo es amateur?
Sí, pero somos jugadores con mucha ilusión. En la Tercera, al igual que en el resto de grupos, jugamos contra algunos equipos que son profesionales, pero a nivel físico y de ilusión no hay diferencia. Técnicamente lo hay, ya que ellos pueden adquirir otros jugadores, pero en ganas e ilusión no nos ganan.
¿Donde comenzó a jugar?
En Burgos. Yo nací aquí cuando mi padre jugaba en el Burgos, aunque muy pronto regresamos a Gipuzkoa. Después de que mi padre acabase su trayectoria en el Eibar volvimos a Burgos. Por eso comencé a jugar en el Vadillo y luego pasé al Burgos Promesas. Pero siempre tenía ganas de regresar a Gipuzkoa, que es también mi tierra, y tuve la opción de ir para allá para hacer mis estudios y estuve hasta la primavera pasada. En Gipuzkoa jugué en el Pasaia y en el Allerru en la División de la Honor y en la Regional Preferente.
¿No descarta volver a Gipuzkoa?
Para nada. Lo que puede pasar en el fútbol nunca se sabe y tal como están las cosas nunca se sabe dónde podemos acabar y en Gipuzkoa sigo teniendo familia y algún día puedo regresar. Tengo 23 años y me queda mucho camino que recorrer, pero ahora mismo mi cabeza está en el Burgos Promesas y quiero ayudar a mi equipo para que en la próxima temporada pueda seguir jugando en Tercera.
¿Nunca ha pensado ser un profesional del fútbol?
De pequeño sí, pero ahora no pienso, aunque es una posibilidad que tampoco descarto. Si llega una opción para ello, será cuestión de estudiar.
¿Ser hijo de un futbolista conocido ha repercutido en su carrera?
No. Él ha hecho su carrera y yo tendré que hacer la mía. Es verdad que de vez en cuando nos comparan, pero sin importancia. A nivel personal lo ha sido todo. Me ha enseñado todo lo que sé. Siempre ha sido una referencia para mí y lo sigue siendo. Él se formó en la Real y también jugó en el Eibar, dos de los equipos más importantes en la provincia, y en Burgos también lo hizo en el Burgos CF y en el Real Burgos, y también ha estado en equipos como el Celta.
¿Hay diferencias entre el fútbol burgalés y guipuzcoano?
Son diferentes. En Gipuzkoa el fútbol es más fuerte, se juega a mucho ritmo, es muy competitivo. En Burgos es más pausado, se deja más espacio, son dos conceptos diferentes, pero yo he disfrutado mucho en Gipuzkoa y también en Burgos.
¿Hay diferencias en los terrenos de juego?
Sí. En Gipuzkoa la mayoría de los terrenos de juego son de hierba artificial, hay pocos de hierba natural. En Burgos, en cambio, es justo lo contrario, ya que la mayoría de los campos son de hierba y hay muy pocos de hierba artificial. Pero también es comprensible, ya que en Gipuzkoa llueve mucho y Burgos es más seco. De todas formas, yo me amoldo muy rápido a los dos campos.
¿Cómo puede explicar a los de fuera lo de los tres Burgos que hay en la actualidad?
La situación del fútbol en Burgos es muy peculiar. Desde siempre el más laureado y el más seguido ha sido el Burgos CF. Ahora mismo yo diría que hay hasta cuatro, ya que también está el CD Burgos, aunque tienen un acuerdo de filialidad con el Burgos CF. Luego estamos nosotros, el Burgos Promesas. También ha reaparecido el Real Burgos. Cuando digo que juego al fútbol en el Burgos, luego les tengo que explicar en qué Burgos estoy jugando. El equipo de la ciudad es el Burgos CF y va a ser difícil cambiarlo. El Real Burgos tuvo su apogeo, cuando llegó a Primera División, pero eso fue hace bastantes años y ahora le va a costar mucho llegar a donde llegó antes. Nosotros, el Burgos Promesas, también tenemos nuestro sitio. Es un equipo que trabaja mucho y muy bien con la cantera, somos los únicos que tenemos una ciudad deportiva en la capital.