El proyecto de construcción de un parque eólico en Ganekogorta, en terrenos de Bizkaia y Araba, está provocando un amplio rechazo social e institucional. Como penúltimo ejemplo, la pasada semana el Ayuntamiento de Okondo aprobó una moción en la que se manifiesta «el desacuerdo y preocupación sobre la implantación de un parque eólico en el Ganekogorta» e insta al Gobierno de Lakua a «que reconsidere su postura».

La moción fue aprobada con el apoyo de todos los grupos políticos que conforman el Pleno de este municipio alavés: Bildu (5 ediles), Okondo Bai (2) y PNV (2).

En el texto se destaca que «la naturaleza y el paisaje son recursos de valor casi incalculable» y que «la interacción del ser humano con la naturaleza ha supuesto su transformación, pero no todas las acciones e interacciones humanas con el medio ambiente generan las mismas afecciones». Y se expresa la preocupación por «las consecuencias que en los recursos naturales, la fauna, el paisaje y el turismo pueden generar la implantación de un parque eólico en el monte Ganekogorta».

Modelo insostenible

El Ayuntamiento de Okondo considera que este proyecto «entraña un modelo de desarrollo insostenible». «Somos defensores de la diversificación de las fuentes de energía y de las energías alternativas -añaden los grupos municipales-, si bien creemos que el Ganekogorta debe seguir siendo nuestro paisaje cotidiano, el pulmón verde de nuestras áreas fabriles y urbanas, y que debe ser respetado como herencia milenaria que pertenece a las generaciones futuras».

También recuerda que el Departamento de Medio Ambiente de la Diputación de Bizkaia mostró su postura desfavorable al proyecto.