La última derrota del Athletic en San Mamés en el torneo de Copa se remonta a 2006, ante el Real Madrid, por 0-1. El problema es que hoy hasta el empate se antoja perjudicial para los intereses rojiblancos. Tras los resultados que se vienen dando en la competición, aquí ya nadie se fía de nadie y esta noche en La Catedral nadie espera que los de Bielsa salgan relajados, ni pensando en la Liga, ni mirando por encima del hombro a ese Albacete que se desplazó a Bilbo haciendo noche en el autobús. Nadie duda de que no ya sólo el once que presente el argentino será de total garantía, sino que los propios protagonistas saben que están ante una `final' copera ante un rival que le va a exigir al máximo. «Tenemos puesta toda la ilusión», lo resumió ayer el entrenador rosarino. «Siempre pensamos en ganar», rubricó su inmutable pensamiento.

Enfrente no habrá un enemigo pequeño, sobre todo cuando, como dijera la Saeta Di Stéfano, «la pelotita no quiere entrar». Y ese es el mal endémico que parece perseguir a los rojiblancos. El propio Bielsa asumió que los «errores cometidos» han variado durante la temporada y que, sin ir más lejos, en Getafe se defendió peor, se hicieron menos ocasiones, pero fue algo puntual. Sí aceptó que «lo que si mantiene unificado es que falta concretar la situaciones de gol, tanto cuando son muchas como cuando son pocas».

Con los hombres de la medular sin olfato de gol, Bielsa echa mano de Fernando Llorente. «Creo que no tendrá dificultad», dijo. Confía en que su aportación ayude en ese sentido, aunque fue tajante al declarar que «nunca entiendo que una cualidad del equipo se resuelva a través de un solo futbolista». Y aunque sí ve al internacional como «un especialista del gol», advierte de que pensar que «con él solo se resolverá el problema de gol, es desatinado». Lo dijo antes Ander Herrera, que no se podía dejar toda la responsabilidad anotadora en Toquero, pero ni en él, ni en Llorente.

Lo que también tiene claro Bielsa es que se marque uno o dos, «siempre pensamos en ganar» porque «yo tengo mucho miedo a la especulación».

Que vuelva la inspiración

El Loco saldrá, como siempre, con todo. Con San José por el lesionado Amorebieta en la zaga y Llorente por Toquero; el resto, los de siempre. El argentino es consciente de que en el partido de ida, el Albacete como colectivo anuló a las individualidades rojiblancas; esta vez confía en imponerse como colectivo, pero que «el peso de nuestras individualidades tengan también trascendencia».

Los Herrera, Muniain, De Marcos o Susaeta tienen esta noche un examen como grupo pero también particular. De ellos depende en gran medida la capacidad ofensiva del equipo, de su chispa e inspiración. Quién sabe, a lo mejor hoy se destapa el bote de ketchup de los goles que diría Van Nistelrooy.