El Caja Laboral Baskonia vivirá esta tarde una jornada de bienvenida y adiós. Por un lado, Matt Walsh debutará con la plantilla gasteiztarra -la casualidad ha querido que juegue ante el Manresa, equipo que lo vio debutar en la ACB-, mientras que la familia baskonista dirá adiós al Iradier Arena.

Sobre Walsh, Dusko Ivanovic declaró que «está asimilando los sistemas» y añadió que «esperamos que pueda debutar contra Manresa».

Mientras, ya hay fecha de traslado al Buesa Arena. Será el próximo 5 de febrero, en el partido que medirá al Baskonia con el Gran Canaria.

La primera fase de las obras del pabellón de Zurbano ya ha concluido y a partir de ahora se compatibilizará la disputa de los partidos con los trabajos que permitirán que el nuevo coliseo azulgrana llegue a los 15.290 asientos para el mes de mayo. Las obras efectuadas hasta ahora permiten volver a utilizar el pabellón con una capacidad de 9.400 espectadores.

Los trabajos de reforma y ampliación han sido sufragados por Lakua, la Diputación de Araba y el Ayuntamiento de Gasteiz y han costado 30 millones de euros.

El Manresa, «interesante»

Sobre el rival de esta tarde, Dusko Ivanovic se mostró elogioso. «El Manresa tiene un equipo interesante, muy bien hecho, con jugadores altos y atléticos. Es un equipo que hace un baloncesto algo diferente a otros años. Juega muy fácil y rápido, corre y rebotea bien... Aun así, es cierto que las lesiones lo han perturbado un poco», dijo.

El exjugador de Bilbao Basket Román Montañez es la principal baja del cuadro del Bagés, mientras que otro ex de la escuadra bilbaina, Javi Rodríguez, es duda. Por su parte, el baskonista Ribas recibía ayer su segunda inyección de plasma en aras de su más pronta recuperación.

Preguntado sobre el posible «peligro» gasteiztarra por jugar un partido a la semana, Ivanovic no dudó en contestar que «me cambiaría por aquellos que juegan entre semana. Y además sería mucho más peligroso».