El Ayuntamiento de Bilbo, por medio del jeltzale José Luis Sabas, edil de Urbanismo, anunció ayer que las obras para la reparación de algunos muelles de la ría del Ibaizabal comenzarán esta próxima semana. Sabas, que estuvo acompañado por el delegado de Gobierno español en la CAV, Carlos Urquijo (PP), apuntó que el objetivo de estas obras será «renovar y reforzar» los muelles que se encuentran deteriorados para que puedan soportar una carga mayor.

El presupuesto de esta obra asciende a 9.858.299 euros. Esta cantidad ha sido aportada por el Ministerio español de Medio Ambiente, Agricultura y Alimentación y está incluida en el acuerdo que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero estableció con el PNV a cambio de su apoyo a los presupuestos del Estado del año pasado.

Las reparaciones se llevarán a cabo en cuatro puntos de las orillas de la ría, desde la zona de Urazurrutia hasta Botika Zaharra. El objetivo del Consistorio es finalizar el proyecto en seis meses, preferiblemente «antes de Aste Nagusia, para que las obras no influyan demasiado en las fiestas», como precisó Sabas.

En tres tramos

El primer tramo, de 361 metros, está situado en la zona de Urazurrutia, entre el cruce la de avenida Askatasuna y Zamakola. Se instalarán piedras de unos 300 kilos que servirán como protección de pie de escollera. El plazo para terminar esta fase ronda los dos meses.

La segunda zona se dividirá, a su vez, en dos obras diferenciadas. La primera de ellas se enmarcará en la parte izquierda de la ría, desde el muelle de La Merced hasta el lavadero de coches, bajo la calle Bailén. La otra obra se extenderá desde la estación de Atxuri hasta la calle Ribera, bajo el grupo escolar de Múgica.

En estos dos tramos se va a realizar un recalce de hormigón, además de una limpieza y retirada de sedimentos. La actuación afectará a 863 metros de muelle, que esperan que se complete en unos cinco meses y medio. Sabas aseguró que estas obras no afectarán al tráfico rodado ni al peatonal.

La tercera zona de renovación será la más importante -y la que mayores quebraderos de cabeza plantee a los viandantes- y permitirá renovar un área «muy deteriorada», según Sabas. Se trata del paseo de Uribitarte, cuya remodelación se extenderá desde el puente del Ayuntamiento hasta la escultura de Ramón Rubial, muy cerca del puente de La Salve. Esta construcción conllevará el corte del paseo para los peatones, mientras que los vehículos y el tranvía mantendrán su actividad habitual. Se espera que en seis meses pueda estar terminado.

También se abordarán profundos cambios en la zona de Botika Zaharra, desde el jardín Venerable Hermano hasta el instituto Experimental Piloto. Esta será una obra sencilla, ya que consiste en colocar micropilotes para reforzar el cuerpo del muro. Por eso, desde el Ayuntamiento se han dado de plazo dos meses y tres semanas.