Maite SOROA | msoroa@gara.net
Crear una nueva «provincia vasca»
En estas páginas ya se ha escrito del estrambótico y nada democrático deseo de algunos, como Basagoiti, de lograr que personas que no residen en Euskal Herria puedan votar aquí, con mando a distancia. Se ve que no les dan las cuentas y quieren hacer más trampas. Como si no hubiéramos soportado suficientes. Y uno de los que se ha sumado al carro es el siempre centrado Pascual Tamburri, quien en «elsemanaldigital» anuncia que «El PP añadirá otra `provincia' vasca y acabará con el ghetto etarra». Lo de añadir otra «provincia» a este país tendría guasa si no fueran en serio. En su diatriba, Tamburri sostenía que «es difícil no ser nacionalista en muchos lugares del País Vasco y en algunos de Navarra, aún hoy», y agregaba que «durante décadas, los patriotas españoles, los sencillamente españoles y también los indiferentes han sido objeto de esa violencia, y no han sido libres de expresar su identidad. No sólo porque los asesinasen, sino también porque su vida era, y es, más difícil». Supongo que como sus lectoras y lectores son más bien el Ebro para abajo le creerán la memez.
Luego, claro, como muchos de esos «patriotas españoles» tuvieron que darse el piro, lo que pide este navarro que adelanta a Barcina por la derecha es «anular esa consecuencia política del terrorismo: que puedan volver a votar en su lugar de origen los que como consecuencia directa o indirecta del nacionalismo violento se marcharon de allí. Y sus descendientes, como es lógico». Y sus amigas, amigos y vecinas de escalera, como es lógico.
¿Y cuántos son esos «desterrados»? Él nos lo cuenta: «Nadie lo sabe con certeza, pero en conjunto podría tratarse de 250.000 con derecho a voto en el País Vasco, o incluso más». Vamos, los que sea menester para ganar las elecciones. Porque de eso se trata, como admite luego. Vean: «si se añade antes de las elecciones regionales de 2013, puede cambiar algunos equilibrios y frustrar algunas esperanzas. Por supuesto, los que se fueron y sus hijos serán libres de ejercer su derecho o no, y podrán votar al partido que quieran, también a Amaiur o como se llame, aunque no sea lo más probable». Por supuesto, no es lo más probable. Si no, los fachas no propondrían esta melonada antidemocrática.