GARA > Idatzia > Kultura

CRíTICA teatro

Picaresca posibilista

 

Carlos GIL

La vida del Lazarillo de Tormes da para aplicarle fundamentos dramatúrgicos, que propicien espectáculos de indubitable contemporaneidad. Los miembros de Mirage se acercan al texto, lo reducen, los refríen, le ponen salsas diversas y lo sirven como nueva cocina, pero apoyándose en la tradición formal, en la declamación de ecos clásicos y con el desdoblamiento del equipo actoral en varios personajes, lo que les lleva a cambiar de voces a buscar estereotipos, a recargar de grasas tópicas lo que en muchos momentos apunta a una auténtica estilización.
 
Desigual, el impacto visual primero, sus elementos escenográficos, el uso de la música en directo, la influencia narrativa del vestuario, acumulan  detalles para configurar una obra actual, incluso la selección textual alcanza en partes de la obra, brillantez, pero cuando parece que estamos abriendo las puertas de algo importante, se descubre que entramos en tramos de cachondeo estudiantil, de risa fácil, de contacto con los espectadores, lo que hace que todo lo logrado se degrade, se reconvierta en algo mucho más normal, sin esa bondad que, insisto, parece apuntar.
Quizás se deba a que el trío actoral tiene más imaginación creativa que técnica interpretativa para llevar esos hallazgos a un valor escénico superior. Es como si los cambios y desdoblamientos les llevaran a una sobreactuación constante, a tratar con brocha gorda lo que parecía una finura. Apuntan buenas maneras, tienen energía y capacidad, pero deben pulir su interpretación para que esa picaresca que nos cuentan  no se ahogue en un posibilismo actoral.
Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo