La izquierda abertzale emitió ayer una nota en la que se subrayó que la sentencia del TSJPV que obliga al Ayuntamiento de Donostia a pagar 8 millones de euros a la empresa Nuevo Desarrollo Anoeta da la razón a quienes desde el principio cuestionaron el proceder del PSE en lo referente a Illunbe.

Esta formación política lamentó que «una vez más» vaya a ser la ciudadanía donostiarra la que tenga que«pagar de nuestro bolsillo las negligencias, irresponsabilidades y chanchullos de los políticos».

Por ello, exigió al PSE y al anterior alcalde, Odón Elorza, que afronten sus responsabilidades políticas. «No se puede permitir, que el PSE actúe como los bancos con la crisis. Primero crean un agujero económico en base a sus intereses, para después hacerle frente con el dinero público», remarcaron.

La izquierda abertzale añadió que «roza lo cómico que quienes abanderan todos estos casos de nefasta gestión se crean en condiciones de darnos lecciones sobre cómo debemos gobernar las instituciones».

El portavoz del PSE en el Ayuntamiento volvió a replicar a las críticas realizadas la víspera por el alcalde y tildó de «desfachatez» que se acuse a su partido de mala gestión.

«Pese a esta sentencia, el Ayuntamiento dispone de un enorme complejo patrimonial adquirido a un precio mucho más barato de lo que marca el mercado. Que Bildu se queje de esta herencia es como para hacérselo mirar. Es verdad que la última sentencia es un lastre, pero Izagirre tiene todo el jamón para vender y obtener importantes ingresos para llevar a cabo la gestión, que ya veremos cómo termina», apostilló su portavoz, Ernesto Gasco.