Maite SOROA | msoroa@gara.net
Vascoparlantes y reses
Hay periodistas que en sus entrevistas incluyen en las preguntas las respuestas que quieren dé el entrevistado. Es lo que ha hecho, aunque no en una entrevista, «El Mundo» ayer y anteayer.
El jueves, «informaba» de la intención del gobierno de la Diputación de Gipuzkoa de utilizar el IRPF «para segregar a la sociedad con un censo de vascoparlantes», y en su editorial ofrecía un cuento fantástico parecido a los relatos de Stephen King, aunque no por su calidad literaria precisamente. Ayer recogía la reacción de PP y PSE a la intención de la Diputación guipuzcoana: «PP y PSE se oponen a la `segregación' en Gipuzkoa por la lengua», titulaba en primera. Observen que entrecomillaba la palabra «segregación», (((como puesta en boca de otros, cuando fue ese diario el primero en utilizarla. Afirmaba que, según el PP, «Nos quieren marcar como reses, es un etiquetado sectario y nazi». A servidora no se le había ocurrido. Mi caja de ahorros me dio la misma oportunidad de relacionarme con la entidad solo en euskara, y me pareció bien. Tendré que avisarle a una buena amiga que apenas habla euskara de que, si le ofrecen una estancia en un balneario, no entre a la sauna.
Después, recordaba que «en un principio, al conocerse en septiembre los planes de la Diputación de crear este censo, el PSE fue muy duro al percibir una voluntad de `catalogar a la ciudadanía' como hacían los `regímenes totalitarios de espeluznante recuerdo'». Pero enseguida ponía las cosas en su sitio, pues si los primeros en reaccionar fueron los del PSE, «Ayer fue el PP quien recogió en mayor medida el hacha de guerra y asemejó `sin ninguna' duda' la actuación de Bildu con la del `régimen nazi'». Pues si el PP y, sobre todo, «El Mundo» lo dicen «sin ninguna duda», están de sobra las explicaciones del gobierno de Bildu acerca de garantizar el derecho de vivir en euskara a los ciudadanos que deseen hacerlo.
También «La Razón» se refería, aunque con un poco de retraso, a ese asunto en su editorial, donde lo metía con calzador. Bajo el titular «ETA sigue en las calles», en el que analizaba el «terrorismo callejero» para llegar a la conclusión de siempre, que hay que dar más leña, ponía como ejemplo de esa necesidad represiva las «actuaciones como la segregación de los no vascoparlantes en una relación fiscal impulsada por el Gobierno guipuzcoano de Bildu», lo cual «no es anecdótico ni inocente». Ya, inocente es el editorial de «La Razón».