Los alumnos de Secundaria de Gasteiz presentan sus «mínimos» en Educación
Los estudiantes de Secundaria de Gasteiz presentaron ayer sus «mínimos» en la delegación de Educación. Unas exigencias encaminadas a poder tomar la palabra en cuestiones vinculadas a su futuro y ejercer el derecho a la huelga sin tener que pedir permiso previo a nadie.
Ion SALGADO |
Los estudiantes de Secundaria de Gasteiz presentaron ayer en la delegación de Educación una serie de «mínimos» destinados a crear un nuevo modelo educativo. Un nuevo sistema «alternativo, popular y libre» que tenga en cuenta la opinión de los estudiantes y garantice el derecho a la huelga de los alumnos que cursan sus estudios en tercero y cuarto de ESO.
La presentación de esos «mínimos», que tuvo lugar pasadas las 14.00, fue el punto y final a una mañana marcada por paros y concentraciones estudiantiles, que concluyeron con una sentada pacífica en la calle San Prudencio, frente a la delegación de Educación.
Antes, a las 11.00, los jóvenes comenzaron a mostrar su disconformidad con el sistema educativo actual en los diferentes paros organizados por el sindicato Ikasle Abertzaleak. La iniciativa, que fue secundada en los principales institutos de la capital alavesa, fue un primer paso de cara a la manifestación del mediodía.
Tras los citados paros, los estudiantes comenzaron a dirigirse en columnas hacia la plaza de la Virgen Blanca. Pasadas las 13.00, más de medio millar de jóvenes, repartidos junto al monumento que preside la céntrica plaza gasteiztarra, iniciaron una marcha por las calles del Ensanche. Una manifestación encabezada por una pancarta en la que se podía leer «Beste hezkuntza baten alde, minimoak kalera!» (Por otra educación, los mínimos a la calle).
Una vez finalizada la marcha, que transcurrió con normalidad, dos jóvenes leyeron un comunicado en la plaza de Correos. Según afirmaron con enfado los encargados de leer el texto, los estudiantes de Gasteiz están «hartos» de aburrirse en clase, de la autoridad de los profesores y de hacer exámenes que, a su parecer, «condicionan» su futuro. «Aparte, no podemos hacer paros con libertad, tenemos dificultades para reunirnos y para comunicarnos, y no se tienen en cuenta nuestros intereses», añadieron.
Por ello, tras la cita en la plaza de Correos, los asistentes a la marcha se dirigieron a la delegación de Educación. Allí reivindicaron la toma en consideración de los «mínimos» presentados hace una semana. Unas ideas básicas donde se solicitan espacios propios para los estudiantes, así como horas lectivas para poder llevar a cabo asambleas y charlas entre el alumnado.
Tal como explicaron, la protesta de ayer se incluye en la llamada «Revolución de marzo», que comenzó con el aniversario del 3 de Marzo y finalizará el próximo día 29 con la huelga general.