La lucha y la presión de los trabajadores ha conseguido que la emprea energética Incoesa (Igorre) haya retirado el despido de siete de sus trabajadores valiéndose para ello de la reforma laboral. La empresa comunicó su decisión la semana pasada argumentando que las cuentas de 2012 iban a traer pérdidas y que la empresa está sobredimensionada en cuanto a mano de obra.

Sin embargo, según explicó a GARA un miembro de la plantilla, durante los últimos años la empresa ha firmado contratos muy importantes obteniendo grandes beneficios. En concreto, recientemente ha firmado un acuerdo marco a tres años por un valor de 24 millones con Iberdrola y Scotish Power.

Declaró que los despidos estaban ingresados y se hacían efectivos el día 2 de abril con una indemnización de veinte días por año, algo que LAB calificó de «robo a mano armada contra la clase trabajadora». Sin embargo la presión por las movilizaciones que la plantilla pretendía llevar a cabo para denunciar la aplicación de la reforma laboral hizo que la empresa convocara un reunión con el comité de empresa.

En la reunión celebrada ayer, la empresa finalmente decidió echarse atrás y retirar el despido de los siete empleados, algo que en pocos casos se suele dar. Los trabajadores exigieron a la empresa que buscara otra alternativa para evitar conflictos ya que temenn que tras estos siete despidos vengan nuevos casos.