Ante el debate que se ha abierto en Iruñea en torno al Plan Estratégico de Cultura del Ayuntamiento, Bildu quiso dejar clara su postura: para este grupo el objetivo común debe ser «corregir la falta de participación» que ha existido en la elaboración del diagnóstico de este plan, retomar el contacto con agentes culturales, colectivos y asociaciones, y «recuperar así la legitimidad» de todo el proceso. Explicaron que en este diagnóstico «solo ha participado el 7 por ciento de los agentes culturales» de la ciudad.

La portavoz Eva Aranguren compareció junto a los concejales Arantza Oscoz y Peio Martínez de Eulate después de que el concejal de Cultura, Fermín Alonso, decidiera rescindir el contrato con la empresa encargada de elaborar el Plan Estratégico por haber entregado el diagnóstico cultural de la ciudad fuera de tiempo. Además, tras esta rescisión, Alonso planteó crear una Mesa de la Cultura. La edil de Bildu insistió en la necesidad de «analizar conjuntamente» entre los grupos municipales y los agentes el diagnóstico realizado, con el fin de conocer en qué están de acuerdo. «Si no se hace ese trabajo previo, estamos dando por bueno automáticamente un diagnóstico en el que hemos coincidido la mayoría del pleno que era absolutamente insuficiente en cuanto a participación», destacó.

En cuanto a la propuesta de UPN de crear una Mesa de la Cultura, Oscoz criticó que esta iniciativa «obedece a la urgente necesidad de UPN de presentar algo ante una dinámica de fracasos y cuestionamiento que está lastrando su imagen». Sobre la propuesta de NaBai de crear un Consejo de la Cultura en lugar de una mesa, señaló que la coalición «plantea un órgano distinto, pero sobre la base de la misma propuesta de UPN».