El paro siguió en el mes de febrero batiendo récords tanto en la Unión Europea como en la eurozona, y en el Estado español hay que echar la vista atrás hasta finales de los noventa para encontrar cifras parecidas.

El desempleo subió una décima en febrero con respecto a enero tanto en la eurozona como en la Unión Europea, y se situó en el 10,8 % en los países de la moneda única, en el 10,2 % en los Veintisiete y en más del doble -en el 23,6%- en el Estado español, que muestra los peores datos del bloque comunitario.

El porcentaje publicado por Eurostat es casi un punto superior al de la EPA, que situaba la tasa de paro a finales de enero en el 22,85%.

El portavoz comunitario de Asuntos Económicos y Monetarios, Amadeu Altafaj, destacó a la agencia Efe que se trata de las mayores cifras de paro en la eurozona desde junio de 1997 y en la UE desde 1999, datos «que preocupan a Bruselas».

«Queda claro que no se trata de limitarse a la disyuntiva» de si convienen medidas de austeridad o crecimiento, pues son necesarias ambas «al ser las dos caras de la misma moneda», dijo, para añadir a continuación que estos datos «son preocupantes y son fruto no solo de la crisis sino también de desequilibrios macroeconómicos».

En total, la UE llegó en febrero a la cifra de los 24,5 millones de personas en paro (17,1 millones de ellos en los países de la moneda única).

El Estado español encabeza el ranking, seguido por Grecia (de la que el último dato registrado es el 21%) y de Portugal (15%).

Los países donde se dieron los porcentajes más bajos de desempleo fueron Austria (4,2%), Holanda (4,9%), Luxemburgo (5,2%) y Alemania (5,7%).