La empresa Negarra de Igorre despedirá a 59 trabajadores
La dirección de la empresa Negarra ha presentado un expediente de extinción de empleo para un tercio de la plantilla (59 trabajadores), acogiéndose a la nueva regulación aprobada por el Gobierno español del PP. Los trabajadores decidirán hoy movilizaciones para que los despidos no sean traumáticos y se acuerden medidas de flexibilidad para evitarlos.
Juanjo BASTERRA | BILBO
La compañía Negarra, de Igorre que produce chimeneas y termos eléctricos, ha presentado un expediente de extinción para un tercio de su plantilla, en concreto, 59 trabajadores de un total de 177. Valiéndose de la nueva reforma laboral «asesta un tijeretazo a su plantilla de forma fácil y barata», según denunció ayer la Federación de Industria de CCOO de Euskadi. Según esta central, la medida «ha caído como un mazazo entre los trabajadores, que no esperaban un golpe a traición de consecuencias tan traumáticas».
Ante el «bache económico» por el que atraviesa la empresa, el comité se ofreció a negociar propuestas sin recurrir a la destrucción de empleo. Pero los responsables de la compañía de Igorre «rechazaron medidas de flexibilidad o coyunturales que eviten que decenas de familias se queden en la calle sin un sustento». Como indica CCOO, la única alternativa que ha planteado la dirección de Negarra es «la declaración de un concurso de acreedores», que el sindicato califica de «un chantaje».
El comité, formado por ocho delegados de CCOO y uno de LAB, ha denunciado que entre los afectados «hay trabajadores de hasta 54 años», y alguno de ellos «acumula una antigüedad de 35 años en la empresa».
El ERE se tramita con arreglo a la nueva legislación impuesta por el Gobierno español del PP, y que motivó la huelga general del pasado 29 de marzo. Con lo que las consecuencias más palpables son que el expediente no necesita que el Gobierno de Gasteiz le dé autorización, sino que actúa de mero tramitador.
Además, los despedidos se irán, si se mantiene el ERE, «con una indemnización de 20 días por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades, al haber justificado la empresa el recorte por motivos económicos -pérdidas en 2011 y bajada de pedidos en 2012-». A juicio de CCOO, conceder «ese obsequio, tras varias décadas dedicadas a la empresa, es una inmoralidad y una burla cruel».
Por otro lado, la central sindical denunció ayer que todos los despidos de Negarra corresponden a trabajadores con contratos indefinidos, a quienes la empresa les comunicó la baja de la empresa «días después de haberles confirmado las vacaciones de verano». CCOO dice que es una forma de proceder «insensible y poco ética» en un momento crítico para las personas afectadas.
Los trabajadores realizarán una asamblea general hoy en la que establecerán un calendario de movilizaciones frente a los despidos.