Aitzol Gogorza se encuentra en la cárcel de Basauri a donde fue trasladado el pasado viernes por motivos de salud. El preso político vasco, que se encontraba cumplimiendo condena en la prisión de Sevilla después de que fuera entregado por el Estado francés en junio de 2011 tras pasar doce años encarcelado, sufre una grave enfermedad siquiátrica.

El traslado del oreretarra fue objeto de comentario por parte de la portavoz de Lakua Idoia Mendia que calificó como «buena noticia» el hecho de que «se acerquen a los que padecen graves enfermedades».

Mientras, Ángeles Pedraza, presidenta de la AVT que fue recibida ayer por el delegado del Gobierno en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa Carlos Urquijo, manifestó que el Gobierno central les había puesto de sobreaviso de antemano. Añadió que es contraria «a todo acercamiento o beneficio penitenciario a los reclusos de ETA» y que aunque la decisión se ajuste a la legalidad vigente, no la «comparte» pero la «acata». Pedraza advirtió que su colectivo estará «encima» del caso de Gogorza para comprobar su evolución.

Por otro lado, ayer Etxerat informó ayer de que la familia del preso lizartzarra Pello Olano no tiene noticias suyas desde que lo sacaran de la cárcel de Jaén para trasladarlo a otro centro penitenciario; y mostró su preocupación así como la de su familia porque, aunque es habitual no informarles sobre los traslados, «son muchos días sin noticias».

A parte, el expreso bilbotarra Kepa Suarez fue recibido anteayer en Alde Zaharra después de haber cumplido cinco años de cárcel en el Estado francés. Por último, ayer en la plaza del Arriaga 120 personas solicitaron la repatriación de los presos.