La consejera de Salud de Nafarroa, Marta Vera, volvió a eludir su compromiso de mantener el servicio de traslado de enfermos de cáncer de Erribera para recibir tratamiento en el Complejo Hospitalario de Iruñea. Por contra, la consejera quiso hacer cargar con los costes del servicio -conocido como Autobús de la Vida- a los ayuntamientos de la zona y puso condicionantes de tipo economicista a su mantenimiento, como «niveles de uso razonables». Vera se escuda en que, según su interpretación, Salud sólo está obligada a subvencionar «el transporte sanitario», es decir, los traslados de enfermos que requieren ambulancia.

UPN ya eliminó el transporte en autobús de enfermos oncológicos que partía de Lizarra, justificándolo en una infrautilización (según sus datos, sólo se ocupaba en un 10%). Por contra, Salud se comprometió a mantener la partida del autobús de Tutera (con un nivel de ocupación de más del 42%, según sus datos) para este año, pero no más allá. No obstante, cabe remarcar que las cifras de la consejera no son trasladables a la práctica, dado que es usual que el autobús de Tutera se complete. Asimismo, las plazas que no se cubren con enfermos son aprovechadas por familiares que arropan a quienes están en tratamiento.

Además de querer imputar parte de los costes del servicio a los ayuntamientos, Vera apuntó que el transporte podría salir a concurso, cuando el trato que ofrece la conductora es una de los rasgos más valorados del servicio.