Gobeo Bay recupera el reggae de raíz desde la ciudad de los rastafaris, Gasteiz
Cuando varios músicos abandonan Potato a mediados de la década de los noventa, se forma Arawak, otro de los nombres clásicos de la escena reggae de Euskal Herria y proyecto que mantiene en Gasteiz la capitalidad del rastafarismo festivo. Década y media después, y tras la grabación de tres discos, llega «Alfa y Omega», aunque dadas las distancias temporales entre discos han decidido iniciar la nueva aventura como Gobeo Bay, un pueblo con bahía imaginaria.
Pablo CABEZA | BILBO
La nostalgia no es mala siempre que no siente mal. Y Gobeo Bay nos traslada con detalles al primerizo Euskadi tropikal, cuando Okiman daba en 1984 su primer concierto con Potato. Desde entonces Gasteiz ha mantenido la tropicalidad de Euskal Herria, aunque no se vivan los mejores momentos ahora mismo. Con todo, y por si acaso, aquí está Gobeo Bay repleto de historia y buenos músicos.
Javier Olloki ha pasado por Potato y Arawak. Además ha colaborado con Ruper Ordorika, Hertzainak, Ambassadors, Skalariak,etc. Julen Trepiana se incorporó a Potato en 1989, es otro Arawak. Ha colaborado, entre otros, con Ambassadors y Skalariak. Gustavo Salvador, batería, toca punk rock con Shit Hit the Fan y ha pasado por Arawak, Potato, Siroko (ska) y Critical (reggae). Colaboraciones con Beboña Bangmatu, Ambassah... y Lone Ark. José Andrés Fernández de Okariz tocó en Merlín (rock), Kontrairo (folk) y Arawak. Jonatan Calvete estuvo en Arawak y Critical, colaborado con Potato. Imanol Martínez posee formación clásica y hasta le da a la música contemporánea. Monika Boneco cuenta con una formación clásica, está en los coros de Gobeo, pero canta tangos o bossa sin el más mínimo contratiempo.
Ayer y hoy
«Nuestro primer amor -apunta Julen Trepiana- el reggae, hoy llamado clásico, antes reggae a secas, nos marcó. Es un estilo del que te puedes fiar, ha pasado el test del tiempo, es la piedra angular sobre la que se apoya todo. Además, en nuestro caso, hemos tenido la suerte de tener bares donde ponían reggae, donde escuchábamos a Culture, Burning Apear, Dennis Brown, Bob Marley... Skatalites es el pasado lejano, pero siempre siempre nos gustará. Y más a mí que tocaba la trompeta. Más tarde la banda británica Aswad nos influyó con sus arreglos cercanos al jazz».
En cuanto al reggae actual Julen no puede evitar señalar su mal momento: «Para algunos acabó casi con la llegada de la era digital, otros meten ahí también al dancehall, cada uno lleva el agua a su molino. Para mí es innegable que el reggae está en horas bajas. En Jamaica sobre todo se oye dancehall. No veo mucha savia nueva, todo me suena a algo que he oído anteriormente. Pero personalmente sigo disfrutando de lo que hay, aunque sea por medio de gente que se dio a conocer hace ya tiempo. Ahí están Luciano, Tarrus Riley, la familia Morgan, singjays como Richie Spice, etc. El foco de atención del roots reggae igual es Europa. Se oye y toca más aquí que en Jamaica. Allí la moda es el dancehall. Hasta hay artistas que piden cuotas de reggae clásico en las radios para preservarlo como una parte fundamental de la cultura jamaicana. Imagínate».
Producción
A pesar de la experiencia de parte de Gobeo Bay, el grupo ha querido que el sonido lo manejase Roberto Sánchez, productor y músico cántabro muy relacionado con Euskal Herria y un gran experto a pesar de su juventud. «El día que creas que lo sabes todo ya no eres un veterano, eres un fósil. Además, la veterania por sí sola no trae la maestría. Roberto es la mejor elección que pudimos tomar y por muchas razones. Es un hombre de reggae, pero aparte de ser músico, maneja una faceta que no es la nuestra, la técnica. Sabe como sacarle chispas al material que tiene, lo hace rápido y te da esa sensación de confianza que otorga el saber que trabajas duro, pero que al final va a quedar bien. No hay tiempo para la duda», concluye Julen.
«Alfa y Omega» contiene un segundo cedé en el que las canciones del primero se han mezclado - gracias a Roberto Sánchez- al más puro estilo dub: buenos graves, efectos de sonido, nuevas pistas, nuevos primeros planos... Un regalo impagable.
Disco: »Alfa y Omega».
Estilo: Reggae.
Sello: Baga Biga.
Curiosidad: Edición en doble cedé. Un disco cantado y otro, (versión dub) prácticamente instrumental.
Tiendas: Ya a la venta.
Gobeo Bay ha planteado el acabado de «Alfa y Omega» (Baga Biga) como un entusiasta encuentro entre el reggae clásico y algún toque pop (sutil) y soul (más claro, ya que la música negra está en los genes del reggae. «Don perfecto» es el reggae melódico con esos aires pop, mientras que el resto del disco registra sonidos de la Jamaika de los setenta. «Al principio -indica Julen- los dub eran para los sound-system, pero acabaron siendo un subgénero del reggae. Básicamente el ingeniero de sonido muta una canción previamente grabada. Para ello utiliza todo lo que quiere. Puede quitar la voz, cualquier instrumento o añadir todo tipo de efectos. P. C.
