El Tribunal de Oslo que juzga a Anders Behring Breivik decidió ayer sustituir a uno de los jueces legos al declararlo «inhábil» por haber pedido en una red social la pena de muerte para el procesado tras los atentados del 22 de julio pasado, en los que murieron 77 personas.

La juez principal, Wenche Elizabeth Arntzen, recordó que a los jueces legos, no letrados, se les aplica también el artículo 108 del código sobre tribunales, que establece que no se puede ejercer de juez «cuando existen circunstancias especiales que pueden debilitar la confianza sobren su habilidad».

En este caso, los cinco jueces que componen el tribunal negaron haberse expresado públicamente sobre la culpabilidad o no de Breivik, cosa que hizo el juez lego sustituido.

El portal de internet Vepsen, que investiga temas relacionados con el racismo y la ultraderecha, informó ayer de que uno de los tres jueces no letrados del Tribunal había publicado un día después de los atentados un artículo en la web del diario «VG» diciendo que la cadena perpetua es «lo único justo» en el caso del acusado.

La juez principal informó en la apertura de la sesión de que el juez lego Thomas Indrebø confesó ser el autor del artículo.

Breivik pide la absolución

Anders Breivik pidió ser absuelto de los cargos imputados argumentando que «los ataques de 22 de julio fueron ataques preventivos en defensa de los noruegos» en una intervención de más de una hora.

«Actué en una situación de emergencia, en nombre de mi pueblo, mi cultura y mi país. Por ello pido ser absuelto», declaró ante la jueza Wenche Elizabeth Arntzen.