Representantes de las cuatro fuerzas soberanistas e independentistas de izquierda no ocultan la preocupación que provoca que trece mujeres y hombres vayan a sentarse en el banquillo de los acusados del tribunal de excepción español por el mero hecho de haber articulado sendas ofertas electorales a los comicios autonómicos del 1 de marzo de 2009. Por ello, una delegación de estos agentes estará el jueves en Madrid para expresar su apoyo y solidaridad a las personas encausadas.

«Este juicio no es ni más ni menos que la continuación de las políticas de ilegalización. Una nueva escenificación -precisaron Oskar Matute, en castellano, e Iban Asenjo, en euskara- de las medidas vulneradoras del derecho a la participación y a la representación política que una gran mayoría de los ciudadanos de Euskal Herria han superado para siempre».

En esa reflexión, los representantes de Alternatiba y EA -que comparecieron junto a Maribi Ugarteburu y Axer Lertxundi, de la izquierda abertzale y Aralar, respectivamente- incidieron en que el proceso contra D3M y Askatasuna vulnera derechos civiles y políticos «y lo hace persiguiendo tan solo objetivos políticos». Frente a esta nueva agresión a la ciudadanía, situaron a una mayoría social y política «que le pide con claridad al Estado que muestre una actitud constructiva ante una oportunidad histórica para superar el conflicto político».

Las cuatro fuerzas políticas instaron al Estado español a que «adopte el camino hacia la solución», dejando a un lado prácticas conculcadoras de derechos básicos del pasado. La principal exigencia, tal y como manifestaron los portavoces ayer en Donostia, es que, «de una vez por todas», se cierre el ciclo de las ilegalizaciones y de actuaciones en contra de actividades políticas». De ahí que estimen «fundamental» que desaparezcan «de forma definitiva» procesos judiciales como el que se iniciará el 3 de mayo en la Audiencia Nacional.

De cara a lograr sacar del inmovilismo al Ejecutivo español, EA, Aralar, Alternatiba e izquierda abertzale consideran «primordial» continuar y fortalecer la movilización ciudadana a nivel local y nacional.

Una de estas iniciativas es la que ayer puso un punto y seguido en Gasteiz. Fue una jornada intensa para los acampados junto a la catedral nueva, que al mediodía participaron en una concentración con un centenar de personas frente al consistorio mientras se presentaba una moción. A la tarde, cientos tomaron parte en una manifestación, que dio paso a una cena en el frontón Auzolan.

El testigo lo recoge hoy Sestao, donde a las 12.30 partirá de la plaza del Kasko una manifestación respaldada por 28 colectivos, entre ellos el Ayuntamiento. En Donostia, Eleak iniciará a las 11.30, en el Boulevard, la confección de un puzle gigante por los derechos civiles y políticos.