Los comités de empresa de Inasa (Irurtzun) y Asientos Esteban (Iruñea) denunciaron ayer la situación en la que se encuentran, ya que la primera se enfrenta a un ERE de modificación de condiciones laborales mientras que la segunda está bajo la amenaza de un expediente que supone el despido de 73 trabajadores. Ambas empresas se encerraron el lunes en la iglesia de San Lorenzo de Iruñea para reclamar una salida a su conflicto laboral.

Tras abandonar el encierro, representantes de las dos factorías comparecieron ante los medios de comunicación. Los trabajadores de Asientos Esteban acusaron al Gobierno UPN-PSN de no defender el empleo de los navarros y de importarle «un pepino» los despidos.

Asimismo, criticaron la pasividad mostrada por la consejería de Trabajo en la reunión que ambas partes mantuvieron el lunes. El motivo de la reunión era tratar el ERE presentado por la empresa para 73 de los 177 trabajadores de la empresa, aunque tal y como apuntaron, el ERE ya se ha hecho efectivo.

Reiteraron que si la dirección quiere que los trabajadores abandonen la huelga, deberá negociar y respetar los puestos de trabajo porque el comité «no está para destruir empleo sino para defenderlo».

En esta misma línea, representantes del comité de huelga de Inasa señalaron que el conflicto no va a tener solución si la empresa mantiene la misma actitud que hasta ahora y aseguraron que el comité «sabrá estar a la altura».

Trece días de huelga

La plantilla de Inasa lleva trece días en huelga indefinida contra la intención de la empresa de aplicar a sus 177 trabajadores una rebaja salarial del 35%. Ayer aclararon que esta huelga «es por culpa de la reforma laboral» e instaron a la dirección de la empresa a que «demuestre de una vez si tiene verdadero interés en dar salida al conflicto y sacar adelante la empresa».

Recalcaron que los objetivos del comité son «la defensa del futuro de la empresa» y para ello los trabajadores plantearon una rebaja salarial del 24%, una reducción de jornada de cuatro días y cambio de calendario y plantilla que hasta el momento no ha recibido respuesta. Ante esta situación, reclamaron a la empresa «seriedad» y disposición a llegar a acuerdos que signifiquen la estabilidad de la empresa.