El jurado declara «culpable de asesinato» al autor de la muerte de Cristina Estébanez
El jurado popular también acusó a Seidel M.G., sobre quien pesaba una orden de alejamiento, de intentar asesinar al que era la actual pareja de la víctima. La Fiscalía solicitó una pena de 35 años de cárcel.GARA | BILBO
El tribunal del jurado en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Bizkaia contra Seidel M.G., acusado de matar en diciembre de 2010 en Barakaldo a su expareja, Cristina Estébanez, ambos de 25 años, y de herir al que entonces era compañero sentimental de la víctima, Aingeru Cerecedo, le declaró ayer «culpable de asesinato» y del intento de asesinato del novio de la fallecida.
El tribunal, compuesto por once personas, estuvo deliberando ayer durante horas, haciéndose pública la decisión alrededor de las 20.00. La defensa de la joven fallecida señaló que se le podría condenar a una pena de entre 30 o 35 años. La Fiscalía provincial de Bizkaia por su parte, solicita para el acusado 34 años y ocho meses de prisión, mientras que la acusación particular, que representa a la familia de la joven fallecida, pide la pena máxima.
Orden de alejamiento vigente
El acusado había mantenido una relación sentimental con la joven entre 2006 y 2010, año en el que interpuso una denuncia contra Seidel M.G. por violencia machista. El Juzgado de Instrucción número 2 de Barakaldo dictó un auto por el que establecía una orden de alejamiento de manera que no se podía acercar a su víctima a una distancia de 300 metros de su persona y domicilio. La joven fue atendida varias veces en el área de Igualdad del Ayuntamiento de Barakaldo, en base al protocolo establecido en los casos de violencia machista, según confirmó tras los hechos Tontxu Rodríguez, alcalde de la localidad. También apuntó que el Consistorio le había ofrecido una casa de acogida, pero «como es lógico, ella quería mantener su vida familiar».
No obstante, el 6 de diciembre de 2010, estando vigente la orden de alejamiento, el imputado accedió al domicilio de Cristina a través de una plataforma aprovechando las obras que se estaban llevando a cabo en el exterior del edificio en el que residía.
El acusado esperó escondido en una habitación hasta la llegada de la joven y de su acompañante, Cerecedo. Cuando ambos entraron, el ahora acusado golpeó con una catana corta al novio de su expareja, pero, al caérsele al suelo, sacó un cuchillo de cocina de 32 centímetros y se lo clavó en el cuello y le produjo un corte. El herido abandonó el domicilio en busca de ayuda.
En ese momento el acusado se dirigió a su exnovia, que se había refugiado en una habitación y la agredió por la espalda, clavándole el cuchillo en dos ocasiones en el cuello. Una de las lesiones resultó mortal de necesidad, lo que le provocó la muerte.
Cerecedo por su parte, fue ingresado en el Hospital de Gurutzeta con ambas venas yugulares y los músculos del cuello seccionadas, y necesitó trece días de asistencia en régimen hospitalario y 120 días impeditivos, quedándole diversas secuelas por las que ha formulado reclamación.
Al joven Seidel M.G., que en la actualidad tiene 27 años, se le imputan asimismo el quebranto de la orden de alejamiento de su expareja y el allanamiento del domicilio de la víctima.
No es la primera vez que un hombre agrede al actual compañero sentimental de su expareja. El domingo, un hombre de 36 años al que la Ertzaintza aún busca, acuchilló en Bilbo mortalmente al novio de su exmujer, un joven de 21 años.