Debate en la UE sobre el modelo bancario
Rajoy insiste en la unión bancaria, los eurobonos y un fondo de garantías
El presidente del Gobierno español volvió ayer a urgir al BCE a inyectar liquidez en la zona euro e insisitió en que la UE avance en la integración fiscal y en una unión bancaria con eurobonos y un fondo que garantice los depósitos.
GARA | MADRID
Rajoy reunió a los senadores del PP y después participó en su última sesión de control en el pleno de la Cámara Alta antes del verano, con el mismo mensaje ante los dos auditorios: «Hay que tener tranquilidad y serenidad porque se necesita tiempo para arreglar el desaguisado dejado por los socialistas».
«Las reformas no producen efecto en media hora y las cosas que se hacen bien tardan tiempo en producir sus efectos», manifestó ante el pleno del Senado, donde garantizó que, «aunque este año la situación no va a ir bien, si lo va a ir en el futuro próximo».
Rajoy se mostró absolutamente convencido de la estrategia emprendida por su Gobierno, que pasa por la austeridad y las reformas estructurales en el Estado español, y por «dar la batalla» en Bruselas para que se avance hacia una integración fiscal y bancaria.
Llevaba varios días defendiendo una unión bancaria y especificó el modelo por el que apuesta, que debe incluir los eurobonos, un supervisor bancario y un fondo de garantía de depósitos europeos.
No obstante, hizo hincapié en que lo más «urgente» es que se resuelva el actual problema de financiación, liquidez y sostenibilidad de la deuda, algo que no depende solo del Estado español, como apuntó al recordar que el pasado agosto las inyecciones del BCE supusieron «un alivio considerable».
«España se levanta sola»
En la misma línea, el ministro español de Hacienda, Cristóbal Montoro, afirmó categórico que «España se levanta sola» y que es un «gran país», y criticó «las malas políticas que la arruinan, la sumen en el paro y la hacen perder credibilidad e imagen», en alusión al Ejecutivo anterior en manos del PSOE.
En la sesión de control al Gobierno en el Senado, Montoro respondió así a la pregunta del senador del PSOE José Miguel Camacho sobre si considera una prioridad «levantar España». Camacho hizo esta pregunta después de que el pasado jueves en el Congreso, la portavoz de Coalición Canaria, Ana Oramas, acusara al ministro de Hacienda de haberla presionado para que votara en contra del ajuste que impulsó el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en mayo de 2010.
Según relató Oramas, Montoro le dijo para intentar convencerla: «Que caiga España, que ya la levantaremos nosotros».
A este respecto, Montoro criticó que el PSOE recurra a «chascarrillos del pasillo» para meterse con el Ejecutivo. El ministro subrayó que él se mostró crítico con los partidos que apoyaban al Gobierno del PSOE porque «estaban arruinando a España, llevándola a una postración internacional y elevando la tasa de paro al 23 %, lo que no sucedía por primera vez».
Montoro insistió en que «España es un gran país, que cuando se pone en marcha, puede liderar a Europa en empleo, en crecimiento y en internacionalizació». Además, recalcó que frente al anterior Gobierno que «llevó a la ruina a España por segunda vez», el actual defiende políticas que son las mismas que la llevaron a «liderar el equilibrio presupuestario».
Merkel gira su estrategia
Entretanto, el Gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, ha elaborado un paquete de medidas para fomentar el crecimiento económico y la creación de empleo en la Unión Europea para lograr el necesario apoyo de la oposición socialdemócrata y verde a la ratificación del pacto fiscal en el Bundestag.
«Más crecimiento para Europa: empleo, inversiones, innovaciones», es el título del documento de ocho páginas, filtrado ayer por varios medios digitales alemanes, y que ha sido elaborado por el Ministerio de Economía en coordinación con los de Finanzas y Exteriores, así como con la Cancillería Federal.
La iniciativa supone un giro de la estrategia alemana para combatir la crisis de la zona del euro, centrada hasta ahora en el estricto ahorro, ya que apuesta por nuevas medidas destinadas a fomentar el crecimiento.
Entre las propuestas del documento figura la de incrementar en 10.000 millones de euros el capital del Banco Europeo de Inversiones para aumentar su capacidad de ayuda a los estados en crisis y su potencial de crédito hasta 15.000 millones de euros anuales.
Asimismo, propone reformar el sistema de concesión de ayudas de la UE, favoreciendo los llamados bonos para proyectos con los que se avalarán créditos privados.
Según el diario alemán Die Welt, el fondo de rescate de la eurozona está estudiando crear una línea de crédito provisional al que podría recurrir el Estado español en caso de que se recapitalicen su bancos.
El G7 revisó ayer «los avances hacia la unión fiscal y financiera» en la Unión Europea y la «respuesta política» ante las renovadas tensiones financieras en la eurozona, según informó el Tesoro de Estados Unidos. La cita celebrada por video conferencia fue convocada por EEUU, Canadá y Japón, los estados no europeos del grupo, del que también forman parte Estado francés, Alemania, Gran Bretaña e Italia.
Los ministros de Finanzas y gobernadores del G7 revisaron la respuesta a los últimos acontecimientos en la economía mundial y los mercados financieros, incluidos los avances hacia la unión fiscal y monetaria en Europa, según un comunicado del Tesoro emitido tras concluir el encuentro.
La escueta nota hecha pública añadía que el grupo «acordó supervisar los acontecimientos estrechamente antes de la reunión del G20 en México», que tendrá lugar los próximos 18 y 19 de junio. Poco más se reveló del contenido de la discusión no prevista, y cuya sorpresiva convocatoria fue dada a conocer el lunes por el ministro de Finanzas de Canadá, Jim Flaherty. Por su parte, el ministro de Finanzas japonés, Jun Azumi, afirmó que acordaron cooperar para abordar la inquietud que genera la crisis europea y que no se discutió la posibilidad de que Grecia abandone el euro.
Por su parte, la Comisión Europea (CE) calificó ayer de «exagerada» la alarma generada por la teleconferencia del G7 para tratar la crisis de la zona del euro, con el Estado español en el centro de las preocupaciones. GARA
El Gobierno español da por válida la cifra de 19.000 millones de dinero público que recibirá Bankia para llevar a cabo su plan de saneamiento y recapitalización, según informaron fuentes cercanas al Ejecutivo.
Estos 19.000 millones son adicionales a la conversión en capital del préstamo público por importe de 4.465 millones de euros que recibió la entidad en 2010 para su constitución, con lo que el respaldo estatal se elevará a 23.465 millones de euros. De esta forma, José Ignacio Goirigolzarri seguirá al frente de Bankia, ya que se había filtrado que podría dejar la presidencia en caso de que la cantidad aportada fuera menor. Las mismas fuentes especificaron que dicho respaldo se materializará una vez cumplido el procedimiento que pasa por la «luz verde» del Banco de España, que articulará el apoyo público a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) una vez lo autorice su órgano de gobierno.
Así figura en el plan de saneamiento y recapitalización presentado por el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, al consejo de la entidad el pasado 25 de mayo, y que se solicitará formalmente al Banco de España. El plan ha contado con el conocimiento del Ejecutivo español y del instituto emisor. El Banco de España recibirá como fecha límite el 11 de julio los planes de saneamiento diseñados por las entidades con el objetivo dar cumplimiento al último decreto de reforma financiera que implica 30.000 millones de euros en provisiones por créditos sanos al «ladrillo».
La solicitud de ayuda pública de Bankia se produce después de que reformulara las cuentas anuales, individuales y consolidadas del ejercicio 2011, tras una revisión en profundidad de la cartera crediticia.
Bankia ha detectado la necesidad de saneamientos adicionales en su cartera inmobiliaria de 4.000 millones de euros, en el resto de su cartera crediticia de 5.500 millones, así como minusvalías latentes de 6.700 millones, principalmente en participadas y activos fiscales.
En primer lugar, el FROB ejecutará «a la mayor brevedad» la conversión en acciones ordinarias del préstamo de participaciones preferentes por importe de 4.465 millones de euros concedido en 2010 para la integración de las siete cajas de ahorros.
Tanto la conversión del préstamo como la ampliación se acometerán en el mes de junio y supondrán una participación de control del Estado en BFA. GARA
La directora ejecutiva del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, expresó ayer su esperanza de que en un futuro la UE sea una unión fiscal y financiera, y no sólo monetaria, como hasta ahora. Lagarde espera que la UE «se amplíe más allá de la mera moneda común para convertirse más en una unión fiscal y financiera, al tiempo que unión monetaria», según informó la agencia de noticias Baltic News Service (BNS).
La directora del FMI, que hizo estas afirmaciones durante su visita a Letonia para participar en un conferencia, espera que los Veintisiete hayan reformado su unión para 2014, para cuando espera que ese país báltico se haya sumado al euro.
Por otra parte, una delegación técnica del Fondo Monetario Internacional (FMI) se encuentra desde ayer en el Estado español en «visita rutinaria», según explicaron fuentes del Ministerio español de Hacienda.
La visita se enmarca en el cumplimiento del artículo IV del Estatuto del FMI, que dispone que los países miembros deben aceptar una vez al año una revisión de su economía por parte de un equipo técnico del organismo. Las mismas fuentes afirmaron que la delegación se reunirá con miembros del Gobierno de Rajoy y autoridades de las comunidades autonómicas y diferentes instituciones.
El FMI ya estuvo en el Estado español entre el 20 y el 25 de enero para comenzar su análisis anual y anunció que lo completaría con una segunda visita a finales de primavera. GARA