El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, denunció ayer el «mezquino» intento del Gobierno del PP de «manipular el censo» para que «cualquier persona» que haya vivido en Hego Euskal Herria, y no solo aquellos que supuestamente se fueron por la acción de ETA, pueda votar en las elecciones a la Cámara autonómica a pesar de residir en el Estado español.

El líder jeltzale avisó a quien «esté tentado de buscar un fraude» de este tipo, de que el PNV «traza una línea roja» en esta materia, puesto que «el futuro de Euskadi pasa por el respeto a la pluralidad de la sociedad vasca, a su voluntad soberana, a la decisión libre y sin adulteraciones de su ciudadanía».

Desde el PP, su presidente, Antonio Basagoiti, acusó a Iñigo Urkullu de estar «más preocupado por recoger las nueces del árbol, que de que podamos convivir». Asimismo, le advirtió de que la reforma «se va a hacer, le guste o no, porque es una cuestión de justicia, de equidad y de restituir cicatrices».

Por su parte, el coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta, equiparó la reforma de la Ley Electoral con «la Marcha Verde que protagonizó la monarquía alauí» de Marruecos «sobre el Sahara».