Hay que redefinir el término basura. Y el de tele-basura. Residuos orgánicos. Lo de la recogida de basuras en Gipuzkoa ha alcanzado un nivel de ideologización que solamente puede ser fruto de alguna presión mafiosa. Se me han cruzado los cables y los programas. Veo tertulias sobre el asunto, escucho radios infectadas de intereses de orden económico y veo una serie, bastante irregular por cierto, en La 2, que va repasando las andanzas de la Mafia en los Estados Unidos. Con su grandes nombres, sus historias basadas en los informes policiales, claro está, y de ese nido de corrupción llamado FBI, pero acabamos siempre en Nápoles en donde la recogida de basuras y su posterior manipulación está en manos de las organizaciones mafiosas, porque, claro está, debe dar unos dividendos muy abultados. O sea, la basura, en la Bolsa.

Pero el concepto de basura y televisión, va variando de intensidad y focalización. Lo peor, lo que más huele, lo que apesta como vertedero abierto en día de sol justiciero son algunas tertulias de la TDT Party. Insolventes totales. Cacatúas que repiten consignas sin utilizar siquiera la posibilidad de la variación sintáctica. Consumidores de eufemismos regalados por la fábrica de mentiras, agentes manipuladores de toda realidad para acercarla a los intereses partidistas indecentes e incalificables. Eso es la auténtica tele-basura. O la basura televisada. Orgánica en el sentido de la democracia orgánica franquista que es la que se está imponiendo

Viendo al hijo de la Pantoja, sentado en una especie de trono en el programa «Deluxe» con Jorge Javier Vázquez, las náuseas que provocaba esa no-entrevista, entraban también en concepto de basura, pero en su acepción de recogida mafiosa. Todo es fruto de un pacto económico con la titular, la señora Pantoja, imputada en un asunto de corrupción política. No agresión a la imputada y promoción de su hijo que vende y compra embarazos, relaciones, y que hace unos días hizo el ridículo artístico más supino en la propia cadena actuando como DJ. Fue tanto el escándalo de su incapacidad artística que Mercedes Milá se lo recriminó. La cadena, le premia con esta promoción en horario estelar.