La crisis financiera de la eurozona monopolizará la cumbre del G-20
Las dudas sobre la solvencia de la banca española y la situación generada tras los comicios de Grecia monopolizarán la cumbre del G-20 que se celebra entre hoy y mañana en Los Cabos (México). Rajoy deberá despejar las dudas del rescate, que han provocado fuertes tensiones en los mercados, al igual que la incertidumbre por Grecia, donde se podría abrir un escenario de renegociación de las condiciones del rescate.Joseba SALBADOR |
En la reunión del G-20 estarán presentes, por parte de la Unión Europea, los presidentes de la Comisión y el Consejo, José Manuel Durao Barroso y Herman Van Rompuy; así como la canciller alemana, Angela Merkel; el presidente español, Mariano Rajoy, el francés, François Hollande; y los primeros ministros de Italia, Mario Monti, y Gran Bretaña, David Cameron.
Una de las cuestiones que se pondrá sobre la mesa en la cumbre de Los Cabos será el rescate de la banca española. Los líderes del G-20 esperan que Rajoy dé más detalles sobre cómo usará este paquete de financiación europeo para recapitalizar su sector financiero, según avanzó el ministro de Finanzas de México, José Antonio Meade. El objetivo es despejar las dudas que ha generado el rescate, y que ha llevado a máximos la rentabilidad de la deuda española.
Desde Los Cabos llegarán también las primeras reacciones al resultado de las elecciones griegas, en las que ha resultado ganador el partido conservador Nueva Democracia (ND), dirigido por Andonis Samarás.
Los líderes europeos ya habían avisado de que interrumpirán la ayuda a Atenas si el nuevo Gobierno rechaza los ajustes comprometidos con la UE, lo que acabaría obligando al país a abandonar la eurozona, una posibilidad que parece alejarse tras las elecciones de ayer.
De hecho, nada más conocer los resultados, los ministros de Finanzas de la zona del euro instaron a Grecia a formar rápidamente un gobierno que tome las riendas del programa de ajustes y reformas acordados. No obstante, podría abrirse un escenario en el que los dirigentes europeos accediesen a renegociar con el nuevo gobierno las condiciones del rescate, pese a la oposición de Alemania.
Esta posibilidad fue apuntada ayer tanto por el ministro belga de Asuntos Exteriores, Didier Reynders, como por el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Angel Gurría. «Es un escenario que veo probable y, si esta es la condición que pone Grecia para su permanencia y luego continuar, yo diría que es algo que debería intentarse», afirmó Gurría en Los Cabos.
Encuentro anual
La primera cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del G-20 se celebró en Washington en noviembre de 2008, tras la quiebra del banco estadounidense Lehman Brothers. Hasta 2010, los dirigentes del G-20 se reunían dos veces al año, y desde el año pasado las reuniones se organizan anualmente.
En el G-20 participan los siete países más industrializados del planeta, con EEUU a la cabeza, y doce naciones emergentes del peso de México -que actúa como anfitrión- y Brasil, a los que se suma la Unión Europea.
Tras la cumbre de México, la siguiente cita importante para resolver la crisis de la eurozona tendrá lugar en Roma, donde se reunirán Angela Merkel, el presidente español Mariano Rajoy, el primer ministro italiano, Mario Monti, y el presidente francés, François Hollande.
En este encuentro, los cuatro mandatarios prepararán la cumbre europea del 28 y el 29 de junio. Sin embargo, Merkel ya rebajó las expectativas de cara a esta cumbre al decir que no se puede esperar el anuncio de un plan maestro para Europa.
El Gobierno español publicará esta semana las necesidades de capital de la banca según la valoración independiente sobre los balances del sector que han realizado la consultora alemana Roland Berger y la estadounidense Oliver Wyman. Aunque oficialmente está previsto que los datos se den a conocer antes del próximo jueves, día 21, se da por hecho que el Gobierno adelantará su publicación y quizá podría desvelarse hoy o mañana en la reunión del G-20 que se celebra en México.
En el mercado se cree que la banca española podría necesitar entre 60.000 y 70.000 millones de euros para superar las pruebas de estrés elaboradas por Roland Berger y Oliver Wyman, que durante un mes han analizado los balances bancarios.
Mientras, el Instituto Internacional de Finanzas (IIF), que agrupa a más de 450 de las grandes entidades financieras privadas de todo el mundo, advirtió ayer de que el rescate español deja a la eurozona con fondos insuficientes en el caso de que necesite asistir a un país grande.
En su informe mensual, el IIF señala que con la decisión de Europa de poner un máximo de 100.000 millones de euros a disposición del sistema financiero español, los fondos de rescate de la eurozona se reducen a un máximo de 351.000 millones.
«Eso significa que tras prometer 100.000 millones para los bancos españoles, los fondos de rescate de la eurozona serán suficientes para ayudar a una economía pequeña como Chipre, pero difícilmente para lidiar con un país grande», señaló.
Los 351.000 millones a los que se refiere el IIF son la suma de los 107.000 millones a los que podrá acceder el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) entre julio y octubre, y los 248.000 millones en recursos no utilizados del Fondo europeo de estabilidad financiera (FEEF). GARA
Integrantes de la iniciativa social «Ez Irentsi-No tragamos» protagonizaron ayer una peculiar protesta, en la que uno de ellos se colocó sobre una cruz para representar que está «crucificado» por la banca, en un acto de denuncia del rescate de las entidades financieras con fondos europeos.
La protesta se desarrolló en la plaza Circular de Bilbao, ante las sedes de BBVA y Santander, y en el marco de un ayuno colectivo de 24 horas que finalizó a medianoche.
El citado movimiento considera el rescate a la banca «una estafa» y exige, en su lugar, «el rescate de las personas en paro, en situación de pobreza o en riesgo de exclusión social». GARA