Coincidió en infantil y cadete con Muniain
Aurtenetxe, una década en Lezama
El lateral se incorporó como alevín a la disciplina rojiblanca en la campaña 2002-03 y ha llegado arriba sin pasar por los filiales.
Joseba VIVANCO I
Cumplió su primer impensable sueño de recalar en Lezama con apenas nueve años, con los alevines. Poco antes, el Athletic se había fijado en él en una prueba en Durango. Primero en coche, con su aita; luego, en el mismo autobús en el que acudían a entrenar chavales como Ander Iturraspe, tres años mayor, o Markel Susaeta, en el cadete, con los que hoy, una década después, comparte vestuario y sueños. Diez años, diez, son los que Jon Aurtenetxe cumplirá esta próxima temporada ligado al Athletic, atado a Lezama.
Vicen Gómez, quien este pasado curso se ha hecho cargo del Juvenil B, fue su primer entrenador en el estreno con la camiseta rojiblanca en la temporada 2002-03. De los chicos con los que compartió aquel su primer vestuario en Lezama, solo Unai Bustinza (en el Bilbao Athletic), Sabin Merino y Pedro Altamira (Basconia) continúan ligados a la disciplina zurigorri; sólo él ha debutado con el mayor. No fue hasta dos temporadas después, ya en el infantil de primer año, cuando coincidió con un navarro recién llegado que estaba llamado a triunfar en San Mamés, Iker Muniain. Fue justo ese curso cuando Aurtenetxe, con 14 años, perdió en accidente de tráfico a uno de sus compañeros de equipo y mejores amigos, Iker Gallastegi.
El joven zornotzarra fue cubriendo etapas hasta que su progresión se catapultó a partir de juveniles. Una tarde, tras un entrenamiento en el que Bingen Arostegi le había puesto las peras al cuarto, le comunicó que tenía que ejercitarse con el primer equipo porque al día siguiente iba a salir de titular ante el Werder Bremen en Europa League. Era el 16 de diciembre de 2009. Hasta entonces, su bautismo con el plantel de Joaquín Caparrós había sido un amistoso en Cascante el año anterior, en el que, además, anotó un gol.
Un debut europeo inesperado
Sin pasar por el Basconia ni el Bilbao Athletic, aquel juvenil debutaba en competición europea sin haber cumplido los 18 años y después de haberse colgado, unos meses antes, la medalla de bronce con la selección española en el Mundial sub´17 en Nigeria. Un año redondo y una temporada que iba a terminar con la guinda soñada: junto a los Magunazelai, Eguaras, Jonxa, Ramalho, Guillermo, Saborit, Ruiz de Galarreta o Peña se proclamaba campeón de la Copa juvenil ante un rival de postín, el Real Madrid que venía de ganar la Liga de campeones con una de sus mejores generaciones de canteranos, liderados por Pablo Sarabia o Álvaro Morata.
Curiosamente, aquella final fue su último partido como juvenil. Tras hacer la pretemporada 2010-11 con el primer equipo, Caparrós decidió contar con él y así, el 29 de agosto de 2010, debutó en liga con el primer equipo frente al Hércules. Desde entonces, ni las dos graves lesiones en ambos hombros, ni la competencia de Koikili, Castillo o Balenziaga han podido con el de Zornotza, que se ganó la confianza del técnico de Utrera - «si no sufre ningún percance, a lo que están expuestos todos los futbolistas, Jon va a ser un jugador importante para el Athletic», aventuró- y esta pasada campaña -a la que se sumó más tarde tras haber ganado el Europeo sub´19 con España- la de un Marcelo Bielsa que le exige subir más la banda y apretar más a su rival en defensa.
Desde que era un chaval ha jugado de todo menos de portero. «A nadie le han regalado estar aquí; el trabajo diario cuenta», defendía Aurtenetxe hace poco. Él llegó, pero ha hecho lo más difícil, mantenerse. Y en la nueva campaña ese volverá a ser de nuevo su reto.
Jon Aurtenetxe se incorporó a la disciplina de Bielsa a mitad de pretemporada y no fue hasta el partido ante el Villarreal en San Mamés cuando logró hacerse con esa banda izquierda que venía ocupando De Marcos. Con Koikili en la nevera, Xabi Castillo lesionado y Balenziaga cedido, las esporádicas apariciones de Iñigo Pérez en ese lateral no han desbancado al de Zornotza. Titular indiscutible -aunque en la grada haya opiniones para todo-, es verdad que no ha tenido competencia por el puesto. Ahora la tendrá en el recuperado Castillo, y Aurtenetxe tendrá que ganarse de nuevo sitio en el once de Bielsa. J.V.