Gloria LATASA | gloriameteo@hotmail.com
Lluvia de verano
Aunque no todas las tormentas son iguales. Cuando su formación está relacionada con la aparición de una sola nube se las conoce como Tormentas Unicelulares (UC) o también como Células Simples. Tienen un ciclo de vida corto (duran entre 20 y 40 minutos) y luego desaparecen. Si posteriormente se llegara a formar otro cumulonimbo, lo haría por separado, sin que existiera una conexión dinámica entre ellos.
Este tipo de tormentas se producen solo cuando la inestabilidad atmosférica no es muy fuerte. Algo que es habitual en la zona de convergencia tropical o en el ecuador. Sin embargo, aquí, en las zonas templadas, casi siempre hay alteraciones en la dirección y velocidad del viento a diferentes niveles (en diferentes capas del aire), que lo inestabilizan aún más y no permiten la formación de células simples con la misma frecuencia.
En principio, de una situación meteorológica así podemos esperar chubascos no muy importantes, granizo de tamaño inferior a 2 centímetros y un frente de racha (parte anterior de la zona convectiva) débil. Aunque si la inestabilidad es mayor -fundamentalmente en zonas tropicales- pueden ser tormentas más intensas, más largas (cerca de una hora) y con repentinos desplomes de viento, agua y granizo.
Una tormenta unicelular tiene el aspecto de una gran coliflor coronada por una «nube sombrero» fibrosa (el yunque). Al principio no son más que pequeñas bolas algodonosas que con la inestabilidad crecen y engordan, hasta que aparece la tapa fibrosa, señal de que la nube (cumulonimbo) ya está totalmente formada. Tras el estallido y descarga de la tormenta, la nube queda reducida a la presencia de un simple yunque residual.