Eleak convoca una marcha ciclista contra las condenas por exhibir fotos en Korrika
GARA |
El movimiento por los derechos civiles Eleak llama a los iruindarras a tomar parte mañana en una marcha en bicicleta que recorrerá la capital navarra para denunciar las condenas contra cinco jóvenes navarros por «mostrar fotos de presos de ETA» mientras tomaban parte en Korrika 2009.
El pasado 31 de mayo, la Audiencia Nacional española decretó año y medio de prisión para quien fuera portavoz del movimiento pro amnistía Josu Esparza -la sentencia reconoce que no portaba imagen alguna- y un año para David Urdin, Oihan Ataun, Mikel Marín e Irati Mugika.
La marcha ciclista arrancará a las 12.30 desde la Plaza de los Ajos y su objetivo es «ir creando esos tan necesarios vientres matrioska -las muñecas rusas son el símbolo de esta campaña de Eleak-, que nos permitan hacer uso de nuestros derechos civiles y políticos mas elementales».
«Necesitamos la activación de la ciudadanía» para proteger «tanto a estos jóvenes como la actividad política en general ante futuros juicios y sentencias», manifestó este colectivo durante su comparecencia de ayer.
Eleak mostró su satisfacción por la legalización de Sortu y las sentencias absolutorias de D3M y Askatasuna, y declaró su convencimiento de «lo que ha condicionado a los tribunales españoles a publicar esas sentencias ha sido la activación ciudadana».
«Así que, viendo el resultado positivo que han dado los vientres matrioska, hagamos lo que sea necesario para crear un vientre colectivo también en Iruñerria, que sea capaz de proteger de la injusticia española de excepción a estos jóvenes que hoy tenemos aquí sentados únicamente por portar fotos de sus amigos encarcelados a miles de kilómetros con la intención de denunciar su situación», concluyó.
«Estaba al tanto»
La AN ha condenado a un año de cárcel a Julen Orbea por «enaltecimiento», ya que según la sentencia «sabía y estaba al tanto» de una pegada de fotos de presos en el escaparate que la cadena Zara tiene en la plaza Miguel de Unamuno de Bilbo.
Los hechos acontencieron en Aste Nagusia 2011, cuando «personas no identificadas» pegaron las imágenes. Orbea se acercó posteriormente al escaparate y según el tribunal «estaba en el acuerdo con los que materializaron dicha exposición y la finalidad de la misma. No era ajeno al acontecer denunciado».