Unos 3.000 estudiantes de secundaria marcharon el miércoles por el centro de Santiago en demanda de un mejor sistema educativo público, gratuito y de calidad, durante una protesta que terminó con disturbios y decenas de detenidos cuando la Policía intentó dispersar a los manifestantes casi al término de la protesta.

Los estudiantes, que marcharon bajo el lema «A un año de lucha aún no se escucha», reclamaron al Gobierno mejoras en la educación secundaria pública, que es gestionada por los municipios, y que según los estudiantes debería retornar a manos del Ministerio.

«Después de un año de movilizaciones en el que ocupamos más de 500 colegios, en materia de secundaria no existe nada, solo un proyecto de ley de desmunicipalización que profundiza más el sistema segregatorio», explicó Cristopher Sarabia, portavoz de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios. Según dijo, ese proyecto busca consti- tuir agencias públicas presididas por los alcaldes, con lo que se pasaría «de una municipalización a una alcaldización».

La administración de los colegios está desde 1981 en manos de los municipios, que reciben recursos del Estado, pero muchos traspasaron esa labor a manos privadas o no emplearon con eficacia esos fondos.