CRISIS FINANCIERA EN LA EUROZONA
El Eurogrupo urge a Madrid a que presente ya la solicitud de rescate de la banca
El Eurogrupo urgió anoche al Gobierno español a que presente cuanto antes la solicitud formal de rescate del sector bancario, que podría ser aprobada por los ministros de Finanzas en su reunión del 9 de julio.
GARA |
El Eurogrupo pidió anoche al Gobierno español que presente el próximo lunes la solicitud formal de rescate de la banca y que complete rápidamente la reestructuración de las entidades con problemas, según informó su presidente, Jean-Claude Juncker. Incluso, la petición podría materializarse hoy mismo, según el ministro francés Pierre Moscovici.
Al término de la reunión que los ministros de Finanzas de la eurozona mantuvieron en Luxemburgo, el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Olli Rehn, especificó que una vez efectuada la solicitud formal, la Comisión Europea iniciará la próxima semana su misión de evaluación sobre el terreno y el Eurogrupo que se celebrará el 9 de julio aprobará con toda probabilidad el rescate.
«Saludo la clara hoja de ruta que ha presentado España. La misión de revisión de la Comisión Europea comenzará la próxima semana una vez hayamos recibido la solicitud», dijo Rehn.
«Después se negociará un memorando de entendimiento para la reestructuración y recapitalización del sector bancario. El objetivo es concluirlo de manera que el Eurogrupo pueda tomar una decisión en su reunión del 9 de julio», añadió el miembro del Ejecutivo comunitario.
También anoche se supo que el préstamo será canalizado primero por el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), vigente en la actualidad, y luego transferido al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), pero si este último instrumento de rescate estuviera en vigor a tiempo, se empleará este instrumento para recapitalizar la banca a través del Gobierno, según explicó Juncker.
De esta forma, se esquivaría la posición de preferencia que tendría el MEDE en una hipotética reestructuración de la deuda española, en la que este fondo europeo tendría prioridad de cobro frente a otros acreedores y eso podría ahuyentar a los inversores privados.
Los ministros de Finanzas de la zona euro iniciaron ayer tarde una reunión en Luxemburgo en la que discutieron las condiciones del rescate bancario de hasta 100.000 millones que preparan para la banca española. Los requisitos se aplicarán no solo a las entidades que reciban ayudas, que podrían llegar a ser liquidadas, sino al conjunto del sistema financiero con exigencias más estrictas en materia de regulación y supervisión.
De Guindos señaló que el fondo de rescate europeo permanente (MEDE), que entrará en vigor probablemente el próximo 9 de julio, es «el ideal desde el punto de vista de lo que es la inyección de capital a los bancos que, en última instancia, es lo que está haciendo España».
Visita a Grecia
Respecto a la situación griega, el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, señaló anoche que miembros de la «troika», formada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el FMI, viajará el próximo lunes a Atenas con el fin de «actualizar» el programa de ajustes y de reformas de ese país, señaló ayer el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.
Al término de la reunión de los ministros de Finanzas, Juncker precisó además que el Fondo de rescate europeo (FEEF) desbloqueará antes de fin de mes los 1.000 millones de euros que forman parte de un tramo anterior de 5.200 millones de euros del que en mayo sólo se entregaron 4.200 millones.
Los ministros de Economía de la eurozona mostraron ayer su división sobre la solicitud del nuevo Gobierno de Grecia de más tiempo para corregir su déficit excesivo, ya que Finlandia y Países Bajos rechazan esta posibilidad, mientras que otros como el Estado francés se muestran más flexibles.
Finlandia, Austria y Holanda, tres de los gobiernos que más duros se han mostrado con Atenas, dieron ayer a entender que rechazan una prolongación de los plazos, que algunas voces reclaman para sacar a Grecia de la espiral de austeridad.
«No creo que sea una buena idea», aseguró preguntada al respecto la ministra finlandesa de Finanzas, Jutta Urpilainen, a su llegada a la reunión del Eurogrupo. A su juicio, es «importante» que Grecia cumpla con el acuerdo en vigor que, insistió, fue aceptado por todos los países del euro.
Su homólogo holandés, Jan Kees de Jager, subrayó que los griegos no tienen «alternativas a la reforma» e hizo hincapié en el mensaje de que Grecia debe seguir adelante con los ajustes.
«Con medidas más inteligentes se puede lograr más y eso es bueno, pero no hay una alternativa a las reformas duras y dolorosas», aseguró.
Por su parte, la ministra austríaca, Maria Fekter, señaló que lo primero será ver la desviación que ha sufrido Grecia en el camino para cumplir sus objetivos durante la pasada campaña electoral. «Si se desvió mucho, Grecia tendrá que trabajar aún más duro», señaló.
El ministro francés de Finanzas, Pierre Moscovici, mantuvo sin embargo un discurso claramente distinto y abogó por que la UE entienda las necesidades griegas y dé esperanza a sus ciudadanos. Según Moscovici, «Grecia tendrá que respetar sus compromisos», pero a la vez «Europa tendrá que ser sensible a los sentimientos de los griegos y tomar medidas para ayudar al país a volver al crecimiento».
El Congreso de los Diputados aprobó ayer el pacto fiscal europeo, con el apoyo del PP, PSOE, CiU, PNV, UPyD y UPN, que recoge, entre otros puntos, la obligación a los países de la UE de cumplir con la denominada «regla de oro» destinada a limitar el déficit estructural anual al 0,5% del PIB.
El apoyo del PSOE se fraguó minutos antes de la votación al acordar con el PP la presentación de una proposición no de ley que se debatirá el martes y que incluye las peticiones de los socialistas sobre crecimiento, aspecto no recogido en el pacto.
Josu Erkoreka (PNV) aludió al apoyo tradicional de su grupo a los asuntos relacionados con la construcción europea y matizó que ratificar el Tratado no supone renunciar a otros planes para favorecer el crecimiento. Rafael Larreina (Amaiur) afirmó que el pacto «no pone las bases para dar respuesta a los problemas» de los ciudadanos y, sin embargo, repercutirá negativamente en el modelo social. GARA
La banca española necesita entre 51.000 y 62.000 millones de euros de capital para afrontar un escenario estresado de máxima exigencia, según se desprende de la evaluación independiente del sector efectuada por las consultoras Oliver Wyman y Roland Berger, que se han embolsado dos millones de euros por sus informes.
Los datos fueron dados a conocer ayer tarde en rueda de prensa por el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, y el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, quienes señalaron que esta horquilla es más amplia que los 40.000 millones de euros de necesidades de capital calculada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), y puede servir de base para la petición concreta de ayudas a la banca por parte del Ejecutivo español.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, sin embargo, retrasó a «los próximos días» la presentación de la solicitud oficial del rescate para el sistema bancario, pese a que el Eurogrupo esperaba que lo hiciera ayer, y restó importancia a este trámite alegando que se trata de una «mera formalidad».
Respecto a la modalidad de rescate, De Guindos señaló que el mecanismo europeo de estabilidad (MEDE), que tiene carácter permanente, es el «ideal» y avanzó que «antes de finales de julio» se conocerán todos los detalles del proceso de recapitalización.
Según los resultados de las auditorías, las necesidades de capital de la banca española «derivan de la pérdida esperada en un escenario macroeconómico muy adverso de hasta 274.000 millones de euros en los años comprendidos entre 2012 y 2014 con una hipotética contracción del PIB del 4,1% este ejercicio y del 2,1 y del 0,3% en los dos siguientes».
Este oscuro escenario, cuyas probabilidades de materializarse son del 1%, contempla otros parámetros como una tasa de paro del 25% para 2012, y del 26% y del 27% para 2013 y 2014, respectivamente. Recoge además un descenso del precio de la vivienda del 19,9% para este año y del 4,5% y del 2,0% para los siguientes.
Según Oliver Wyman, de la pérdida esperada de entre 253.000 y 274.000 millones en el periodo de tres años se deduce una necesidad de hasta 62.000 millones para elevar el ratio de capital de máxima calidad (core tier 1) hasta el 9%. Esta necesidad surge tras aplicar provisiones (98.000 millones), generación de beneficios (hasta 68.000 millones) y exceso de capital (hasta 39.000 millones).
Por su parte, Roland Berger reduce hasta 52.000 millones la necesidad de capital tras deducir una pérdida esperada de 170.000 millones un esquema de protección de activos (11.000 millones), inyecciones de capital (17.000 millones), y retención de beneficios y excedente de capital (90.000 millones).
Estas necesidades se concentrarán en las entidades que ya han sido objeto de actuaciones por parte de las autoridades nacionales a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), indicaron, sin aludir a Bankia Catalunya Caixa, Novacaixagalicia o Banco de Valencia.
A falta de conocer la segunda fase del análisis que concluirán las cuatro auditoras (Deloitte, KPMG, PwC y Deloitte) en setiembre y que desvelarán las necesidades de capital entidad por entidad, las que requerirán apoyo público serán «las menos rentables, con vocación más regional, centradas en el sector inmobiliario y más vulnerables». Las tres mayores entidades, Santander, BBVA y La Caixa, no requerirán de capital adicional. GARA