Campeonatos de Europa
Farah calienta motores con un oro cantado antes de «sus» Juegos
El campeón mundial y europeo de 5.000 metros defiende su territorio sin problemas por delante del alemán Gabius y del turco Arikan.
Miren SÁENZ
Mohamed Farah consiguió la primera medalla de oro de estos Campeonatos de Europa en la única final de la primera jornada. Cualquier otro resultado hubiera sido un desastre para el campeón europeo y mundial de los 5.000 metros que acreditaba además la mejor marca mundial de la temporada (12:56.98).
No la mejoró, pero conservó el título que ya había logrado en Barcelona hace dos años, aunque en la capital catalana apostó por el doblete y esta vez ha tachado el 10.00o de su programa teniendo en cuenta que dentro de un mes en Londres va tener muchos ojos encima por su pasaporte británico y su condición de campeón mundial de 5.000 y subcampeón de 10.000 que con 29 años se va haciendo un sitio entre las estrellas del atletismo.
Mo Farah es uno de los escasos campeones en Daegu'2011 que ha aterrizado en la gélida Helsinki, ayer soleada por la mañana y nublada con algún chaparrón por la tarde. En el mismo escenario donde en los Juegos Olímpicos de 1952 el legendario Emil Zatopek conquistó no solo las dos pruebas de fondo de la pista sino también el maratón en una semana irrepetible, hizo valer sus galones en esta final directa que congregó a 25 aspirantes a todo menos al oro.
El corredor nacido en Mogadiscio controló la carrera desde el primer metro para acelerar en la última vuelta. Polat Kemboi Arikan le dio vidilla. Este turco nacido en Kenia, que hace 25 días se llevó en Bilbo la Copa de Europa de 10.000 metros, agilizó la prueba para conformarse con el bronce después de pelear por la plata. Se la quitó el alemán Arne Gabius, mientras el azerbaiyano Hayle Ibrahimov -bronce en Barcelona-, que aguantó a Farah hasta el toque de campana pagó la factura y se quedó sexto y sin premio cuando el campeón ponía metros de por medio. Esta vez solo enarboló la bandera británica y no la de Somalilandia, como en sus primeros éxitos.
«Realmente creo que este evento es importante en el calendario, incluso en un año olímpico. Por otra parte, se trataba de un buen calentamiento para los Juegos Olímpicos de Londres», reconoció tras vencer.
Naroa Agirre madrugará hoy en Helsinki para afrontar la calificación de pértiga, prevista para las 9.05 en el estadio Olímpico, una hora menos en Euskal Herria. La donostiarra lleva unas temporadas a la baja y tampoco esta primavera ha conseguido prepararse en condiciones para el verano, después de sufrir en abril una lesión en el pie izquierdo. Hace un par de semanas compitió en Barcelona y no pasó de 4,10.
De aquella Naroa que en 2007 llegó a elevarse hasta los 4,56 metros y buscaba la regularidad en esos parámetros nunca más se supo. La prueba ha crecido y no solo de la mano de Isinbayeva (5,06), sino de otras especialistas que han surgido en otros puntos del planeta.
La siberiana aun no ha debutado esta temporada al aire libre. Esta misma semana, el lunes concretamente, explicaba en un comunicado que cancelaba su participación en el meeting de Reims, previsto para el 4 de julio, porque su entrenador Trofimov consideraba que debía trabajar su técnica y realizar una formación específica. «Necesito más tiempo para estar segura». Y es que algunas europeas han decidido reservarse para los Juegos de Londres. Otra rusa de podio Svetlana Feofanova también ha pasado del Europeo al igual que la polaca Rogowska, otra de las grandes. En estas circunstancias la alemana Silke Speigelburg (4.77) encabeza la lista, seguida de la checa Jirina Ptacnikova (4.62), mientras también anda por allí la polaca Monica Pirek, que aunque este año no ha pasado de los 4,50 metros es una de las que ha alcanzado los 4,82 en alguna ocasión. M.S.
