Mikel ASTARLOZA | CORREDOR DEL EUSKALTEL EUSKADI
«Será un Tour especial por volver a la carrera que más me gusta»
A sus 32 años y en su octavo Tour, Mikel Astarloza sintió ayer en el día de presentación de equipos de Lieja unas sensaciones especiales al volver a la carrera en la que no ha podido competir desde 2009. Vuelve con el mismo objetivo que cumplió entonces, ganar una etapa y lograr una buena general a través de las fugas con un recorrido que le beneficia con pocas llegadas en alto y 100 kilómetros contrarreloj.
Joseba ITURRIA
El ciclista sanpedrotarra regresa a su carrera preferida, en la que participó desde su debut en 2003 hasta que en 2009 pasó en unos días de la gloria al ganar una etapa y acabar undécimo en la general al infierno tras comunicársele que en un control realizado días antes del Tour había dado un positivo por EPO. Tras dos años de sanción y de reivindicar su inocencia, Astarloza ha vuelto a competir y al Tour y llega con ilusión a Lieja tras verse en Suiza mejor de lo esperado.
¿Siente algo especial al volver al Tour tras dos años de ausencia?
Va a ser mi octavo Tour y no lo voy a vivir como un Tour más. Va a ser especial porque es un retorno tras dos años sin poder estar en el Tour, pero relativizando todo. Tengo claro que ninguno será para mí como el de 2003, que lo tengo idealizado porque fue mi primer Tour, era el del Centenario, salió de París y todo lo tengo muy presente. Pero este sí será muy especial porque vuelvo a la carrera que más me gusta.
¿Cuesta recuperar el nivel tras dos años sin competir?
Lo que noto es que quizás donde tenía antes el punto débil, la falta de chispa o de cambios de ritmo, he perdido aún más. Mi punto fuerte era la recuperación y las carreras largas y en Suiza tras nueve etapas acabé muy entero y saco la conclusión de que mi punto débil de antes ahora es más débil, pero que mi punto fuerte sigue igual que antes. La primera parte de la temporada no me ha salido bien. En la Euskal Herriko Itzulia tenía que estar bien y no me quedé a gusto y ahora, tras el descanso en mayo, en Suiza me he visto mejor de lo esperado. Aunque tenía falta de ritmo, me veo margen para mejorar de cara al Tour.
Le beneficia que el Tour es, ante todo, una carrera en la que lo importante es la recuperación...
El Tour pasa muchísima factura. Para nosotros empieza en la mitad. La primera parte es de los sprinters y en principio no tenemos que tener protagonismo. A partir de ahí se nota la fatiga y es donde hay que dar lo mejor de nosotros. Siempre he sido un corredor de resistencia antes del parón de dos años. Con la edad siempre se suele decir que eres más diesel y tendré que sacar beneficio a esa virtud.
¿Qué objetivos se marca antes del inicio de la carrera?
Personalmente mi objetivo es ganar una etapa. Es el mejor recuerdo que tengo de 2009, esa victoria de etapa me gustaría repetirla. Luego hay que ver cuáles serán los objetivos del equipo. Samuel será el líder y habrá que trabajar para que pueda estar muy cerca del podio. Ya que no están Andy Schleck y Contador, Samuel entra en la lista de los aspirantes al podio.
¿El equipo tiene claro que la etapa hay que buscarla entre todos o se prioriza arropar al líder?
Por un lado esta claro que hay que trabajar para Samuel porque es un líder sólido que ha demostrado que puede estar adelante, pero son 21 días y cada uno tendremos nuestras oportunidades y habrá que sacarles beneficio. Estoy contento del recorrido porque son etapas duras con pocas llegadas en alto, hay bajadas antes de meta y eso beneficia a corredores como yo que no subimos con los escaladores puros, pero que en escapadas podemos desenvolvernos mejor. Cuando hay que bajar desde el último puerto hasta la meta hay más juego para mí.
¿Comparte que es un Tour demasiado suave en el que todo se decidirá en las cronos?
Para nada comparto que sea más blando. Esta claro que no se acaba en puertos como Luz Ardiden o Alpe d'Huez, pero el recorrido es muy duro. Los 100 kilómetros contrarreloj marcarán diferencias importantes, pero las etapas de montaña son muy duras. Hay pocas llegadas en alto, pero en Alpes y Pirineos hay etapas muy duras y se marcarán también diferencias grandes.
Ha sido noveno, decimosexto y undécimo en sus tres últimas participaciones en el Tour. ¿Piensa disputar la general?
Siempre he sido un corredor que hace buenas generales. Soy un buen rodador, hago buenas cronos, subo bien y, si todo va bien, estaré bastante adelante. Para mí no es un objetivo la clasificación general, es el objetivo para Samuel. Pero al margen de que creo que lo puedo hacer bien, mis objetivos van a ser buscar escapadas largas para luchar por ello de otra forma.
De hecho en sus buenas generales ha ayudado el tiempo que ha conseguido en escapadas...
Mis mejores resultados sí han sido gracias a escapadas. No he cogido fugas de diez minutos, pero si llegas en etapas de montaña con dos o tres minutos, siempre vas arañando tiempo a los escaladores, a los que también les puedo sacar tiempo en las cronos, y eso me ha permitido hacer buenas generales.
Aunque no aparece en el palmarés oficial su victoria conseguida en 2009 en Saint Girons al ser retirados todos sus resultados tras un positivo que nunca aceptó, Astarloza no solo la considera suya, siente que ninguna otra le hará tanta ilusión.
¿Considera que la victoria lograda en el Tour de 2009 como suya?
Sin duda alguna. A mí esa etapa no me la quitan y me quedo con el recuerdo de aquello e incluso puedo decir que conseguir otra victoria de etapa en el Tour sería muy ilusionante, pero siempre la primera hace más ilusión por romper el hielo. Consiguiendo otra victoria tendría otros sentimientos, como el de sacar toda la rabia por todo lo que he pasado estos años, pero la sensación que me dio esa primera victoria fue muy especial y la guardo con mucho cariño, al margen de lo que pasó.
Siempre se dice que la primera es la primera...
Tengo siete Tours, éste va a ser el octavo y cada uno es diferente pero, por poner un ejemplo, la primera vez que llegué a los Campos Elíseos en 2003 es la que más ilusión me hizo. La primera siempre es la más bonita, es donde rompes el sueño y, en ese sentido, el llegar a París en 2003 o la victoria de 2009 van a ser siempre las primeras, aunque intentaremos andar lo mejor posible para pelear por otra victoria de etapa y andar lo mejor posible.
Tras lo que sucedió en aquel verano de 2009, ¿sintió que nunca volvería al Tour?
En ningún momento. Desde el primer momento tuve claro que mi carrera deportiva no acababa en ese momento y que no me iba a quedar sin otro Tour. Necesitaba volver al Tour y al pelotón y a partir de este año ya veremos. Pero sí tenía ese sentimiento de que esto no se acababa y que tenía que volver. Joseba ITURRIA