Nitsan Dunay, primera línea israelí de 21 años y 170 centímetros, procedente del campeón de la Liga israelí Bney Herzeliya, ha fichado por dos temporadas con el Bera Bera, convirtiéndose en la cuarta incorporación del club donostiarra tras las de Patricia Elorza, María Núñez y Adriana Castro.

Dunay es una jugadora que la entrenadora Reyes Karrere seguía desde hace tiempo, y las dificultades para fichar con que se ha encontrado Bera Bera, en pleno éxodo de jugadoras de la División de Honor femenina a otras Ligas (una veintena de ellas ya ha anunciado sus nuevos destinos, la mitad en la Liga francesa), ha contribuído a la llegada de la israelí, «una apuesta, tanto para nosotras como para ella», señalaba ayer Karrere, para añadir que «puede encajar bien dentro de nuestro estilo de juego».

Aunque sus condiciones no suplen la capacidad goleadora de Bea Fernández o Punko desde los nueve metros, su versatilidad y el juego entre líneas son del agrado de la entrenadora de Bera Bera. Tras este refuerzo, a las donostiarras les quedaría por incorporar una segunda pivote, y otra jugadora de primera línea.

El próximo martes se celebrará en Viena el sorteo de los grupos de clasificación para la Champions League, en el que Bera Bera conocerá a los tres rivales con los que se jugará una plaza para la fase de grupos. El equipo comenzará su pretemporada el 1 de agosto.

Por otro lado, Bera Bera ha dado a conocer también el nuevo organigrama del club, tras la marcha de Amaia Ramírez, presidenta los dos últimos años. La gestión del club pivotará sobre cuatro áreas: Tati Garmendia se responsabilizará de las relaciones institucionales y la gestión de los fichajes; Reyes Karrere se encargará de todo lo relacionado con el primer equipo; Verónica Valverde asumirá el área de promoción del balonmano base; y Eli Barrera se ocupará de las tareas administrativas.

El reto, en palabras de Garmendia, «es mejorar lo logrado el año pasado».