Assange no se presenta a la citación policial por sentirse inseguro
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, refugiado desde el 19 de junio en la embajada de Ecuador en Londres, no se entregará a la Policía y permanecerá en la legación, informaron sus abogados. «Su vida y su libertad, así como la de su organización están en juego», remarcaron.
GARA |
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, cuya extradición fue aprobada por el Tribunal Supremo británico, anunció a través de sus abogados que no se entregará a la Policía y que seguirá refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres por temor a que Washigton pueda iniciar trámites judiciales en su contra.
Assange estaba citado a las 11.30 de ayer en la comisaría del barrio londinense de Belgravia, en el centro de la capital, para ser extraditado a Suecia, donde la Fiscalía le acusa de violación.
En los 18 meses transcurridos desde su detención en diciembre de 2010, ha agotado todos los recursos disponibles en la Justicia británica para evitar la extradición. El 14 de junio, el Tribunal Supremo dio luz verde a su extradición, aunque la bloqueó durante dos semanas, hasta el pasado jueves, para que sus abogados pudieran presentar una apelación ante la Corte Europea de Derechos Humanos.
«Está claro que el proceso contra Assange podría llevarlo a Estados Unidos, lo que violaría sus derechos. Se siente inseguro ante la posible extradición a este país», subrayó su abogada Susan Benn, quien estimó que «es cuestión de tiempo» que las autoridades estadounidenses inicien un proceso de extradición contra el editor.
Pidió que su decisión de ignorar la citación policial no sea interpretada como una señal de «falta de respeto». «Los asuntos que afronta son serios. Su vida y su libertad y la vida y libertad de su organización y de los que están asociados a ella están en juego», advirtió.
Se refirió al caso del militar estadounidense Bradley Manning, que supuestamente ayudó a filtrar información que llegó a manos de WikiLeaks y que actualmente está detenido. El portal que dirigía Assange divulgó desde 2010 miles de cables diplomáticos confidenciales que airearon métodos y prácticas cuestionables de muchos gobiernos y que avergonzaron especialmente a Washington.
En una entrevista concedida el jueves a la BBC, Assange calificó su situación de «escandalosa» y pidió garantías sobre el hecho de que no será acusado en Estados Unidos.
En cambio, tuvo palabras amables para el personal de la Embajada ecuatoriana.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, que se reunió a principios de semana en Quito con su embajadora en Londres, Ana Albán, y el ministro de Relaciones Exteriores, Ricardo Patiño, para examinar la solicitud de Assange, declaró que su Gobierno estaba analizando el proceso judicial y que se tomaría «el tiempo que sea necesario».
En una entrevista con la BBC el jueves por la noche, día en que vencía el plazo dado por el Supremo, Assange afirmó que quería obtener garantías de que EEUU no presentará cargos en su contra.