fórmula uno GP de Gran Bretaña
Webber y Alonso aparcan su amistad
El australiano adelantó al de Ferrari a falta de solo cuatro vueltas para cruzar la línea de meta gracias a los neumáticos duros.
Imanol CARRILLO
En el mundo de la Fórmula Uno es muy habitual escuchar que las amistades entre pilotos no existen. Sin embargo, de la misma manera que se suelen intuir esas rivalidades, también es sabido que Mark Webber (Red Bull) y Fernando Alonso (Ferrari) mantienen una buena amistad, tanto dentro como fuera del paddock. Incluso, tal simpatía entre ambos pilotos ha llevado en alguna ocasión a situar al australiano a los mandos del Cavallino Rampante en sustitución del brasileño Felipe Massa.
No obstante, cuando cada uno se viste con su mono de trabajo y se suben a sus respectivos bólidos, la amistad se queda aparcada en los boxes para dar paso a una sana rivalidad. Y el mejor ejemplo de ello se vio ayer en el GP de Gran Bretaña disputado en el trazado de Silverstone.
Después de liderar toda la carrera, Alonso, que llevaba gomas blandas, vio cómo a falta de solo cuatro vueltas para cruzar la meta Webber lo adelantaba gracias a un mejor ritmo de pilotaje con neumáticos duros.
De esta manera, el aussie, segundo del Mundial, se alzó con su segunda victoria de la temporada -tras la lograda en Montecarlo-, algo que comparte, precisamente, con Alonso, que mantiene el liderato. Ambos son los únicos que han repetido triunfo en lo que va de año.
Además, la victoria del de Red Bull es la más rápida de la presente campaña, ya que las 52 vueltas del trazado inglés se recorrieron en un tiempo de 1.25:11.288, superando la del GP de Canadá (1.32:29.586).
Pulso entre solo dos pilotos
El asturiano partía desde la pole y ya en una salida bastante limpia -solo cabe destacar un trompo de Di Resta que le obligó a abandonar- se defendió muy bien del ataque de Webber. En esas primeras curvas se pudieron ver un par de bonitos adelantamientos, como el que protagonizaron Grosjean (Lotus) y Kobayashi (Sauber).
La victoria fue un pulso entre Alonso y Webber, ya que nadie luchó en ningún momento por el triunfo. Solo Lewis Hamilton (McLaren), que corría en casa y pasó desapercibido, comandó la carrera de la vuelta 15 a la 19, exactamente durante la primera parada de Alonso en boxes. El dos veces campeón del mundo pudo adelantar al inglés dentro de la pista. Hamilton opuso algo de resistencia, pero el de Ferrari se llevó el gato al agua.
La vuelta 34 sería clave. Webber realizaba su segunda parada para poner gomas duras. Alonso no entró hasta la 38, pero puso un compuesto blando. Las diferencias entre ambos se iban recortando poco a poco... hasta que el australiano se situó detrás del piloto asturiano. El adelantamiento -muy limpio, por cierto- no se hizo esperar y Webber repitió victoria en Silverstone tras la lograda en 2010.
Ambos pilotos ya se pueden sentar alrededor de una mesa para charlar amigablemente.
El ganador del GP de Gran Bretaña, Mark Webber (Red Bull), recalcó que «la victoria es muy especial» y pasó a detallar cómo fue la prueba: «Era una carrera muy interesante, con poca estrategia. Alonso no estaba tan lejos y, después de mi última parada, mi ingeniero me previno por radio que sufría con sus neumáticos blandos. Al mismo tiempo, sé que Fernando es un viejo zorro astuto, pues pensaba que se iba a contentar con cuidar sus neumáticos esperando devolver un pequeño golpe. Luego me encontré a menos de dos segundos de él y vi que era verdad, fue un poco aburrido. Utilicé el DRS tan pronto como pude».
Por su parte, Fernando Alonso señaló que «ha sido un día positivo, estoy muy contento. Mark venía demasiado rápido, nos tocamos y era mejor acabar en el podio que con cero puntos. Por tanto, hemos tenido que conformarnos con la segunda posición».
No tuvo ningún reparo en felicitar a su rival y amigo: «En la última parte, Webber ha sido mucho más rápido que nosotros, se merece la victoria, así que felicidades para el equipo Red Bull». GARA