Thomas Voeckler (Europcar) relataba cómo se había planteado la etapa: «La he hecho ascenso por ascenso, como si fueran cuatro carreras el mismo día. No había hecho ningún estudio del recorrido, pero corro en estos puertos de montaña desde que tenía 19 años, y conocía el camino por el corazón. Me ha costado darme cuenta de que he pasado en cabeza cuatro puertos en los Pirineos. Esto es lo que yo veía en la televisión cuando era niño, y ahora soy yo quien lo ha hecho. ¿El maillot de la montaña? Al principio dije que no era una obsesión, pero ahora mentiría si dijera que no he pensado en ello, han sido dos semanas para poder pensarlo. Desde que se concretó la escapada tuve claro que el liderato de la montaña se convertiría en mi objetivo. Se lo dije a Brice Feillu, que estaba conmigo. No he escatimado ningún esfuerzo para conseguirlo. Solo quería despegarme de Vinokourov y Voigt en el Peyresourde. Si ahora tengo cuatro puntos de diferencia a favor, habrá que intentarlo de nuevo mañana. Pero es mejor tener ventaja que ir por detrás».

Haimar Zubeldia (Radioshack) mejoraba un puesto en la general tras aprovechar el desfallecimiento de Cadel Evans, el gran perdedor de la etapa reina de los Pirineos, y hacía «un buen balance» de la jornada. «Desde que aceleró el Liquigas en el Aspin, a Evans se le vio bastante justo de fuerzas. Luego en el Peyresourde volvió a tener dificultades y había que aprovecharlo», comentó en meta el ciclista de Usurbil, añadiendo que había tenido «buenas piernas», a pesar de que sufrió algún apuro cuando Nibali atacó dos veces en el Peyresourde. «Era una etapa en la que había que aguantar. Aunque me encontré bien, el ataque de Nibali fue muy duro y no pude seguirle, por lo que decidí subir a mi ritmo. El balance ha sido bueno y ahora a ver qué sucede en la próxima etapa, donde también puede haber movimiento», concluyó.

Gorka Izagirre (Euskaltel), que firmó un magnífico tercer puesto en la etapa afirmó que «hoy he terminado más contento que en Foix, donde fui quinto. Una vez más el equipo ha hecho un trabajo fenomenal, ya que hemos metido a tres hombres en la escapada. Azanza ha hecho un gran trabajo antes del Tourmalet, y después Egoi Martínez. Este equipo es una piña y eso se tiene que notar de alguna manera en la carretera. He intentado seguir a Voeckler, pero el francés cuando tiene el día súper no hay quien le siga. Le hemos tenido cerca, pero ha sido imposible alcanzarlo. Hay que dar las gracias a la afición y a los amigos, y a todo el mundo, a la marea naranja que hacen especiales estas etapas».

Vincenzo Nibali (Liquigas) era otro que sonreía tras cruzar la meta, ya que cada vez tiene más cerca el podio de París: «Estoy contento de cómo han salido las cosas hoy, pero no del todo. Ataqué con la idea de hacer diferencias con Wiggins y Froome, pero no lo he conseguido. No pude hacer nada bajando. No era un recorrido final muy técnico. Estoy cerca del podio, sí, pero quiero seguir intentándolo mañana (por hoy) y tratar de lograr una victoria de etapa».

Cadel Evans (BMC), que perdió casi cuatro minutos en la meta, era la otra cara de la moneda. «El Tour ha terminado para mí. He tenido problemas de estómago en la salida y cuando eso te sucede dos horas antes del inicio no se puede hacer mucho. No pensé que me afectaría durante la carrera. No he tenido mi nivel normal, es evidente. No estoy seguro de estar suficientemente lejos en la general para que los de arriba me ignoren y me dejen libertad para meterme en una escapada. Este año, que todavía no ha terminado para mí, no está saliendo como yo quería», dijo el australiano.

Bradley Wiggins (Sky), por último, se congratuló al señalar que «hemos superado con éxito la prueba de hoy porque hemos logrado colocar la carrera en un escenario ideal, ganando tiempo a Cadel Evans y demostrando que podemos neutralizar los ataques de Nibali, que está muy fuerte. Ha sido una gran jornada, a pesar del intenso calor que ha hecho. Nibali es un corredor de mucha clase. Ha ganado la Vuelta y ha subido al podio del Giro de Italia. Nunca se le puede subestimar. Bastante haríamos si le podemos superar».