Amaiur, tras confirmar que se opone a los dos reales decretos con los que el Congreso convalidará hoy en Madrid los recortes propuestos por el Gobierno español -abandonará el hemiciclo en el momento de la votación-, manifestó que el PP «se ha propuesto dar la última puntilla a las conquistas sociales y laborales que durante los últimos años se han logrado a base de mucho esfuerzo» y abogó por «propiciar, favorecer y participar en el impulso de una dinámica política, social e institucional de oposición de los recortes que desde el Gobierno español se le quieren imponer a Euskal Herria».

En una comparecencia en Donostia en la que participaron los diputados en el Congreso Maite Aristegi y Xabier Mikel Errekondo, la coalición abertzale mostró su apoyo a las movilizaciones contra los recortes sociales que se están convocando desde la mayoría sindical y también llamó a participar en la manifestación que con este motivo ha organizado Euskal Herria Bildu para el sábado en Bilbo.

Preguntados sobre la posibilidad de un adelanto electoral en la CAV, tanto Aristegi como Errekondo reconocieron que barajan ese supuesto para otoño y que es conveniente que tenga lugar porque, en palabras de Errekondo, «la situación económica, laboral y social es muy grave y el actual Gobierno no es capaz de dar la respuesta necesaria desde Euskal Herria. Por su parte, Aristegi añadió que «tenemos que responder como país y el Gobierno de Patxi López no tiene esa capacidad, además de que no cuenta con la legitimidad necesaria para hacerlo».

«Soberanía, imprescindible»

En la rueda de prensa de ayer, Amaiur insistió en que Euskal Herria «tiene derecho a salir por si misma de esta crisis» y añadió que la soberanía política, económica, financiera y social son «imprescindibles para poder desarrollar políticas solidarias y justas».

Desde la coalición soberanista se acusó al Ejecutivo español de ser «sumiso a la banca y a las grandes corporaciones financieras, pero déspota con las gentes de la calle». Como consecuencia de ello, Amaiur opina que el Estado de bienestar «está en la UCI, desregularizazión del mercado laboral, repago en la Sanidad pública, recortes en Educación... el desmantelamiento del sector público».

En este sentido, Amaiur manifestó que «no es posible que PP y UPN, partidos que representan a un 20% de la población de Hego Euskal Herria, impongan a la inmensa mayoría de la ciudadanía vasca unas medidas injustas e insolidarias». Tras esta afirmación, la formación abertzale apuntó que «es hora de que Euskal Herria ejerza su plena soberanía y emprenda su propio camino».

Protesta ruidosa

Miles de personas se echaron a las calles en Hego Euskal Herria a meter ruido en protesta por los recortes sociales que se están aplicando al amparo de la crisis, convocadas por la mayoría sindical vasca y por decenas de colectivos sociales. Además de las cuatro capitales y sus barrios, decenas de localidades vivieron caceroladas o concentraciones ruidosas.

En Bilbo, cientos de ciudadanos, acompañados por dirigentes de ELA y LAB, ocuparon la Plaza Circular e hicieron patente su indignación con el sonido de pitos y sirenas. En Iruñea, en la Plaza del Ayuntamiento, cientos de personas protestaron haciendo sonar cacerolas, silbatos y cualquier otro objeto capaz de hacer ruido. Los reunidos se concentraron tras una pancarta en la que se leía, «Bankarentzat, dirua. Herriarentzat, pobrezia. ¡No a los recortes!». Durante el acto, Imanol Pascual, de ELA, explicó que el objetivo de la cacerolada era «denunciar que la política de recortes lo único que va a crear es más paro y pobreza». Por su parte, Igor Arroyo, de LAB, defendió la movilización contra «unos recortes brutales, sin precedentes en las últimas décadas».