Las noticias y titulares que se asoman durante estos convulsos días de crisis nos descubren un panorama fúnebre que adquiere una especial relevancia cuando son los propios medios de comunicación los que están padeciendo esta imparable trituradora laboral. En relación a este tema, a nadie se le escapa el cajón sin fondo en el que se han convertido las diversas cadenas autonómicas y tras lo que se está escenificando en Radiotelevisión Valenciana, ahora le ha llegado el turno a esa auténtica casa de locos llamada Telemadrid.

Tal y como señalan diversas fuentes -entre las cuales se incluye el no menos torpedeado Grupo Prisa-, las principales entidades financieras del Estado español comparten la idea común de que no están por la labor de prestar más dinero a este medio, situándolo al borde del precipicio ya que no puede hacer frente a los vencimientos inmediatos de los créditos. En resumen, Telemadrid necesita con urgencia 88 millones de euros.

Ante esta perspectiva tan poco halagüeña, esta empresa «pública» dirigida por José Antonio Sánchez parece decidida a solicitar los fondos monetarios que requiere a la Comunidad de Madrid y, entonando aquel «Help!» de los Beatles, quieren reclamar la atención de la presidenta Esperanza Aguirre para poder abonar las nóminas de los trabajadores correspondientes a los meses de julio y agosto, pagar a proveedores y amortizar créditos.

Actualmente, la situación que sufre Telemadrid es la de quiebra técnica y a pesar del desesperado contraataque orquestado desde el propio ente autonómico, quien ha negado esta situación de «quiebra técnica», y ha recordado que la Comunidad «siempre se ha hecho cargo de la financiación» del organismo desde sus orígenes.

A través de una nota emitida por la propia Telemadrid, salen al paso de este tipo de informaciones «malintencionadas» acerca de su situación financiera que, a su juicio, sólo sirven para generar «alarma social e inquietud en la plantilla».

Al margen de lo que se afirme desde Radiotelevisión Madrid, parece claro que de los 88 millones de euros que necesita de manera inmediata, 34 corresponden a un crédito concedido por el banco alemán LandsBank cuya dirección ha recibido instrucciones de su central encaminadas a amortizar todas las operaciones al vencimiento y ese vencimiento, pesado como una lápida, es el inminente 30 de julio.

Además, Bankia reclama 3,6 millones; Banesto, 12 y Bankinter, 6; esto es, Telemadrid necesita urgente 50 millones, que unidos a los 37 millones de endeudamiento previstos para año, nos dan una idea aproximada del tamaño del iceberg contra el que parece dirigirse este flamante «Titanic» tan mimado por Esperanza Aguirre y su gobierno pretoriano.