En la tarde del 11 de julio se detectó en el interior de la planta química de Arkema un escape de gas ácido, lo que obligó, según Interior de Lakua, a la activación del plan de emergencia de la compañía y a alertar a SOS Deiak. Como medida preventiva, se cortó el corredor del Kadagua y la carretera general -las BI-636 y BI-3656- y hasta llegó a desalojarse un funeral que se celebraba en el vecino Zaramillo, al otro lado del Kadagua, barrio que pertenece a Gueñes.

Aunque en la nota de prensa difundida, el Departamento que dirige Rodolfo Ares hablaba de que miembros de Protección Civil habían avisado a la población para que se confinara en sus domicilios, lo cierto es que, según denunciaron varios vecinos de Alonsotegi, no se hizo. «Tampoco sonó la sirena de alarma de Arbuio», aclararon.

Haciéndose eco de las denuncias vecinales, Bildu ha solicitado información al Consistorio de Alonsotegi, para conocer qué pasó en la antigua Atochem y cómo se efectuó el protocolo en el plan municipal de emergencias. Los soberanistas denuncian que una semana después de su petición, el PNV «no nos haya dado nada», por lo que exigieron transparencia en el caso.